Educación

SLEP Puelche en marcha blanca: administrará 69 establecimientos educacionales de la provincia de Biobío

A partir del 1 de enero de 2026, los municipios dejarán de ser sostenedores del sistema escolar público en siete comunas de la provincia, dando paso a una nueva etapa.

educación, aprendiendo, ingeniería, Pixabay
educación, aprendiendo, ingeniería / FUENTE: Pixabay

Un profundo cambio en la gestión del sistema escolar público se está concretando progresivamente en la provincia de Biobío. Desde el 1 de enero de 2026, las municipalidades dejarán de ser sostenedoras de establecimientos educacionales, traspasando dicha función al nuevo Servicio Local de Educación Pública (SLEP) Puelche.

Así lo confirmó el director ejecutivo del SLEP, Héctor Otárola, en entrevista con Radio San Cristóbal, en entrevista con Radio San Cristóbal, donde explicó el proceso en curso. "Los alcaldes dejarán de ser sostenedores el próximo año, y nosotros vamos a tomar la administración de 69 establecimientos y 20 jardines infantiles y salas cuna", detalló.

¿EN QUÉ CONSISTE?

La creación del SLEP Puelche busca fortalecer la educación pública en comunas mayoritariamente rurales: Antuco, Mulchén, Quilaco, Quilleco, Santa Bárbara, Tucapel y Alto Biobío. Este cambio busca no solo mejorar la gestión, sino también reforzar infraestructura y recursos, asegurando mejores oportunidades de aprendizaje para más de 14.800 estudiantes.

Además, este proceso incluye un trabajo coordinado con las comunidades locales y sus autoridades, para garantizar que las soluciones se ajusten a las realidades y desafíos propios de la región. Por lo mismo es que ya se han efectuado reuniones con los alcaldes y jefes de los departamentos de Administración de Educación Municipal (DAEM) de cada territorio.

"El primer desafío que tenemos es informar a la comunidad el impacto positivo que va a tener esta nueva administración. Ya iniciamos un proceso de conversación con los alcaldes y también con los siete jefes Daem, para la elaboración del presupuesto del próximo año", detalló Otárola. 

FASES DE IMPLEMENTACIÓN

El cronograma de implementación contempla tres fases: la de anticipación, realizada en 2023; la de instalación, que se ejecutará durante todo 2025; y la entrada en régimen, programada para 2026. En este periodo, el SLEP busca articularse con los distintos actores educativos y sociales del territorio.

"Hemos estado en terreno, conversando con profesores, asistentes de la educación y también con el personal de los jardines Vía Transferencia de Fondos (VTF). Este año es de implementación e información a la comunidad, y por supuesto también de organización para asumir la administración el próximo año", precisó el director ejecutivo.

En relación con las implicancias que tiene este traspaso tanto para estudiantes como para los docentes, la autoridad detalló que los esfuerzos se concentrarán en mejorar los resultados de los alumnos en las pruebas estandarizadas. "Lo vamos a hacer con los profesores, con los asistentes, con nuestros apoderados y con la comunidad, invitando también a nuestros alcaldes. La educación se construye entre todos", precisó.

DESAFÍOS HISTÓRICOS

Uno de los principales retos será abordar los problemas de infraestructura que afectan a varios establecimientos. "Hay muchas escuelas que no cuentan con reconocimiento oficial porque sus instalaciones no cumplen con los estándares del Ministerio de Educación. Eso impide que reciban subvención por algunos cursos, y es una situación que debemos revertir", explicó Otárola.

La reposición será progresiva. Se contempla iniciar mejoras a partir de 2026, considerando que los proyectos de conservación demoran, en promedio, un año en ejecutarse.

Otro punto crítico es la disminución de matrícula y la baja asistencia escolar, fenómenos que han impactado en la calidad del aprendizaje. "Muchos apoderados han optado por enviar a sus hijos a colegios de Los Ángeles. Nuestro trabajo será hacer más atractivas las escuelas locales, con proyectos pertinentes para cada comunidad, de manera que la gente vuelva a confiar en la educación pública rural", agregó.

TENSIONES PREVIAS

Considerando las dificultades que han enfrentado otros SLEP en el país, especialmente en cuanto a retrasos en el pago de remuneraciones, Otárola aseguró que se están tomando medidas preventivas.

"El próximo año tendremos cerca de 2.000 profesores y 1.500 asistentes de la educación. Nuestro objetivo es tener una administración ordenada, con bases de datos bien estructuradas desde ahora, para iniciar el régimen con normalidad y sin conflictos a partir de enero de 2026", afirmó.

Aunque aún se encuentra en marcha blanca, el SLEP ya ha debido enfrentar contingencias, como el incendio que afectó a la Escuela de Villucura en Santa Bárbara. El siniestro destruyó gran parte del establecimiento, afectando a una comunidad educativa de 29 alumnos.

"Estuvimos en terreno junto al alcalde y al seremi de Educación. Aunque las clases pueden continuar en un salón no dañado, sabemos que es una solución transitoria. Estamos evaluando alternativas para reponer el establecimiento y asegurar una residencia para los alumnos internos. Una posibilidad es la residencia familiar vía Junaeb", concluyó.




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