Editorial

"Tolerancia cero": del discurso a la práctica

Investigación, Pixabay
Investigación / FUENTE: Pixabay

El anuncio de investigaciones contra los 143 funcionarios del Servicio de Salud Biobío que asistieron a casinos mientras se encontraban con licencias médicas abre un nuevo capítulo en un tema que ha generado creciente inquietud en la opinión pública. El caso se suma a los ya conocidos 220 funcionarios pertenecientes a tres organismos municipales de Los Ángeles que viajaron al extranjero en circunstancias similares, lo que confirma que no se trata de situaciones aisladas, sino de un patrón de uso indebido que requiere ser enfrentado con seriedad.

Como ha informado diario La Tribuna, el problema trasciende lo individual. Basta recordar que, en mayo de este año, Los Ángeles apareció como la segunda comuna del país con mayor gasto en licencias médicas, alcanzando los $8.961 millones en 2024, es decir, un 8,3% de su gasto total en personal, muy por sobre el promedio nacional de 5,8%. Más aún, la capital provincial lideró el ranking nacional en gasto de licencias del área de salud municipal, con $3.581 millones, recursos que pudieron destinarse —por ejemplo— a mejorar la atención médica, comprar medicamentos o modernizar la infraestructura hospitalaria.

Frente a esta realidad, ha habido señales institucionales, como la renuncia del seremi del Deporte del Biobío tras conocerse su viaje al extranjero con licencia. Sin embargo, persiste un desafío mayor: lograr que la política de "tolerancia cero" se traduzca en procedimientos eficaces y sanciones que no queden solo en el discurso. A nivel nacional, de los más de 44.000 funcionarios públicos involucrados en irregularidades entre 2023 y 2024, solo se han iniciado 8.301 sumarios, de los cuales 969 concluyeron con medidas disciplinarias y 52 con destituciones.

La lentitud de los procesos preocupa especialmente en el sector salud, donde solo un 9% de los médicos que asistieron partos mientras estaban con licencia han sido sumariados, lo que refleja las dificultades de un sistema que avanza más despacio de lo que la ciudadanía espera.

En la región del Biobío, donde se registraron casi 4.000 salidas y entradas del país y más de 2.000 ingresos a casinos por funcionarios con licencia, los habitantes observan con atención el curso de las investigaciones.

La Contraloría ya ha entregado los antecedentes, ahora corresponde a las jefaturas de servicios avanzar con celeridad en los sumarios. Lo valorable es que el Servicio de Salud Biobío ha iniciado acciones, pero lo que marcará la diferencia será la obtención de resultados concretos, porque el gran desafío está en que la denominada "tolerancia cero" deje de ser una promesa y se convierta en una práctica verificable, capaz de fortalecer la fe ciudadana en la gestión pública.

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