Plaga de langostas en Quilaco: ¿Respuesta tardía?

Cada año la situación se repite, es incontrolable y definitivamente alarma a los ciudadanos.

Quilaco es una comuna relativamente tranquila, alejada de las grandes urbes subsiste gracias al empeño de su esforzada gente, pero con la llegada de la primavera, mientras muchos comienzan a disfrutar de los hermosos días de sol, los quilaquinos comienzan a preocuparse. Y no es para menos, llevan décadas siendo azotados año a año por una plaga que no hace más que inquietarlos.

Cerca del mes de octubre empiezan a aparecer las primeras langostas de tierra, insectos que si bien son pequeños y aparentan no hacer mucho daño, se reproducen rápidamente y comienzan a avanzar arrasando con todo lo que hay a su paso.

La gran cantidad de langostas, ya llegado diciembre comienzan a avanzar, ello porque le brotan las alas. El número considerable de insectos provoca importantes pérdidas en la agricultura y es que si bien se alimentan de pasto y hortalizas, el sinnúmero de estos seres provoca daños importantes. A ello también se puede sumar el ganado, considerando que esta especie también come pasto, principal alimento por ejemplo de los corderos.

La situación es delicada y la molestia y desesperación de los vecinos ha sido tal que incluso han acudido al SAG buscando soluciones rápidas.

Si bien, desde el gobierno aseguraron que ya trabajan en el problema y que aún hay tiempo para realizar la fumigación correspondiente.

El problema es que entendiendo que esto ocurre prácticamente todos los años y que ya se sabía qué hacer y cuál era la solución, por algún motivo no se ha ejecutado nada.

La plaga está en su apogeo, con una incontrolable cantidad de insectos que afecta por lo menos tres sectores importantes de la comuna de Quilaco. ¿Qué queda ahora para los vecinos? ¿Ver como las langostas se van comiendo el pasto y sus siembras? ¿Quedarse de brazos cruzados a esperar que se haga algo?

El panorama es negativo, por lo mismo los vecinos requieren de una acción concreta lo antes posible.