Ojo con Beatriz Sánchez

El día de ayer, se dio a conocer una nueva medición del Centro de Estudios Adimark, referente a las preferencias de la ciudadanía para la próxima elección presidencial.

Si bien los lideratos se mantienen prácticamente iguales - Piñera bajó 3 puntos y Guillier 4-  lo que ha causado mayor impacto, es el despegue casi inédito en las candidaturas políticas, de Beatriz Sánchez, la representante del Frente Amplio.

La encuesta dejó como resultado a Sebastián Piñera con un 24% de las preferencias, Alejandro Guillier con el 19 y la sorpresa de la reconocida periodista llegó al 11% ubicándose en el tercer lugar, con claras opciones de seguir creciendo.

Sin lugar a dudas, su irrupción en la carrera a La Moneda viene a modificar el escenario electoral, similar al fenómeno de MEO en 2009 y que algunos han comparado con la tendencia política global que se ha visto en países como España o Francia.

El Frente Amplio, se ha ubicado a la izquierda de la Nueva Mayoría, incluso han dejado al Partido Comunista a la Derecha y se han consolidado con un gran trabajo en terreno a lo largo del país y de manera coordinada, como una opción para los descontentos. De hecho, su líder, el diputado Giorgio Jackson, es según la última medición de Cadem, la figura política del país mejor evaluada por la ciudadanía con un 57% de respaldo.

Esta situación trae diversas interpretaciones y teorías que podemos analizar en relación a lo que podría ocurrir en octubre.

Primero. Si el Frente Amplio sigue consolidándose como carta presidencial, perfectamente pueden sorprender pasando a segunda vuelta. ¿Se les uniría la Nueva Mayoría?

Segundo. Alejandro Guillier, podría comenzar a desmoronarse como opción de centro izquierda, ya que su imagen construida basada en un hombre alejado de la política tradicional, no es tal, ya que mientras Sánchez es efectivamente un rostro nuevo, él es senador por Antofagasta con el cupo del partido Radical. Podría debilitarse.

Tercero. Piñera, quién hoy lidera las preferencias de la ciudadanía, podría -si no logra desmarcarse de los conflictos entre los negocios y la política en que se ha visto envuelto en los últimos meses-  perder la elección, incluso en primera vuelta.

Cuarto. Nuevamente contra Piñera, si Beatriz Sánchez, logra reunir a los desencantados y eventualmente pierde la elección en primera vuelta, puede traspasarle los votos a Guillier, hundiendo las opciones del ex mandatario de la centro derecha de volver al poder. Pocos han visto ese punto.

Lo que alguna vez tuvo Michelle Bachelet, quien regresó a ser candidata a la presidencia por segunda vez, sabiendo que arrasaría en la elección, será un fenómeno que probablemente, nunca volvamos a ver.