El Gobierno presentó este lunes en la Cámara de Diputadas y Diputados el proyecto de ley de reforma tributaria que busca introducir beneficios dirigidos a la clase media y las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes), además de reducir exenciones que hoy benefician a sectores de mayores ingresos.
La iniciativa fue anunciada por el ministro de Hacienda, Mario Marcel, y la subsecretaria Heidi Berner, en la sede de la Confederación Nacional de Dueños de Camiones de Chile (CNDC), tras una reunión con representantes de diversos gremios económicos.
El ministro Marcel detalló que la propuesta tiene tres líneas principales de acción: apoyar a las Mipymes mediante un nuevo régimen transparente, entregar alivios tributarios a quienes arriendan viviendas y a adultos mayores propietarios, y modernizar el sistema de contribuciones y exenciones.
Los beneficios propuestos alcanzarían a más de 1 millón de Mipymes, 900 mil arrendatarios y cerca de 80.000 adultos mayores. El costo fiscal de las medidas se estima en US$ 1.000 millones anuales, el que será compensado con ajustes al Impuesto Global Complementario para altos ingresos, cambios en la tributación de fondos de inversión y reformas al sistema de herencias y donaciones.
"Ruta del Emprendimiento" y alivios para arrendatarios y adultos mayores
Uno de los pilares de la reforma es el fortalecimiento del régimen tributario "transparente" para las pequeñas empresas, que exime del pago del Impuesto de Primera Categoría y traslada las obligaciones tributarias al impuesto personal de los propietarios. Según el ministro Marcel, esta medida busca facilitar la formalización y crecimiento del segmento, en un contexto donde actualmente solo una fracción de las empresas opta por este régimen.
Entre las medidas adicionales, se contempla la creación de un monotributo social, que permitirá a personas naturales con ingresos anuales menores a 310 UF y pertenecientes al 80% del Registro Social de Hogares formalizar su actividad comercial mediante un pago mensual fijo de media UTM. También se establecerá un régimen simplificado para nuevos emprendimientos con un monto fijo de impuestos durante los primeros años de actividad.
Además, el Gobierno anunció la suspensión del reavalúo de bienes raíces no agrícolas que debía realizarse en 2026, postergándolo para el año 2027, con el fin de perfeccionar sus criterios técnicos e incorporar la retroalimentación de los municipios.