Cultivo de berries: una oportunidad para pequeños y medianos agricultores

La provincia de Biobío ofrece ventajosas condiciones para el cultivo de berries. Entre este tipo de frutos encontramos arándanos, cerezas, frambuesas, frutillas, murta o murtilla, guindas, moras, entre otros.

Si bien hace algunos años la producción y comercialización de estos alimentos explotó muy fuerte en la sexta y séptima regiones, a raíz del cambio climático este tipo de plantaciones se han ido trasladando paulatinamente más hacia el sur del país.

Así lo comentó el ingeniero comercial y magíster en Dirección de Empresas de la Universidad del Desarrollo, Mauricio Gutiérrez, también ex seremi de Economía durante el primer gobierno del electo Presidente Sebastián Piñera.

VENTAJAS COMPARATIVAS

Para este profesional, la obtención de estos frutos es un tema que resulta muy atractivo, “porque presenta una alta rentabilidad por hectárea, a diferencia de los cultivos tradicionales”, destacó.

“Chile está muy bien posicionado en el tema de los berries a nivel internacional, porque sus políticas agrícolas son muy serias, con controles de plagas y de calidad, por tanto, es esperable que sobretodo el pequeño y mediano agricultor que tiene menos superficie para cultivar, siga explorando en este tipo de frutos”, agregó.

Según Gutiérrez, el éxito alcanzado por Chile en esta materia llevó a países como Argentina a iniciar también una incipiente industria de berries.

“Argentina después del éxito de Chile, que tuvo sobretodo con los arándanos, también empezó a incursionar en este tipo de cultivos por el tema de contrastación con los Estados Unidos, empezó a hacer un poco de competencia con Chile, lo que significó una baja en los precios espectaculares que tenían estos productos cuando partió esto hace como una década atrás”, indicó.

NUEVO DESAFÍO

En este sentido, el ex seremi de Economía apuntó que el desafío de quienes se iniciaron en este negocio con una visión de tener producciones tempraneras, pero con baja carga por planta, tienen que avanzar a una etapa donde se deben explorar nuevas variedades de arándanos “que si bien no sean tan tempranera, pero que carguen más kilos por planta”, especificó.

“La rentabilidad ya tiene que ir abocada por el factor volumen de producción, insistiendo en que nosotros como país tenemos una imagen de una mayor seriedad y calidad de los productos en comparación a nuestros vecinos argentinos, porque tendemos a ser mucho más rigurosos en nuestros controles de calidad”, subrayó.

Respecto de las ventajas comparativas que ofrece la provincia de Biobío para la producción de berries, insistió en el factor climático. “Tenemos hartas horas de frío en el invierno que es muy bueno para el arándano y en el verano tenemos un clima muy benigno para este cultivo. No tenemos tantas restricciones de agua, por lo tanto, el riego también es un factor que nos otorga ventajas comparativas en relación a los otros actores que están involucrados en este rubro”, explicó.

“Espero que los pequeños y medianos agricultores de la provincia de Biobío hagan esta apuesta, porque es mucho más rentable que los cultivos tradicionales”, concluyó el ingeniero comercial y magíster en Dirección de Empresas.

DATOS SOBRE EL ARÁNDANO EN CHILE

Según datos de la Asociación de Empresas de Alimentos de Chile, en el país el negocio del arándano procesado es principalmente el congelado. El 2011 representó del 98 por ciento del valor exportado.

Sólo en la primera década del nuevo milenio (2000 al 2010) la producción de arándanos creció a una tasa promedio anual de 35,5 por ciento. Dentro de ello, la fracción destinada a la industria aumentó a un promedio de 55.9 por ciento por año.

Al 2011 los envíos se concentraban fundamentalmente en 3 países: Estado Unidos, Canadá y Australia. Ese año recibieron el 70 por ciento del volumen exportado.