Regístrate Regístrate en nuestro newsletter
Radio San Cristobal 97.5 FM San Cristobal
Diario Papel digital
La Tribuna

"El deporte es mi vida": el triatleta angelino Claudio Soto enfrenta nuevos desafíos en su carrera

por Norman Matus Matus

Nacido en Mulchén y formado deportivamente en Los Ángeles, inició su camino en el BMX y la natación antes de convertirse en un triatleta de proyección internacional.

Con mirada serena y la convicción intacta, Claudio Soto se prepara para un nuevo desafío deportivo, símbolo vivo de esfuerzo y superación / La Tribuna

La historia de Claudio Soto Espíndola comienza el 31 de mayo de 1975, en Mulchén, donde nació, y desde los 7 años en Los Ángeles, donde su familia se radicó, construyendo desde entonces y paso a paso, una vida marcada por el deporte y la búsqueda constante de nuevos desafíos. A sus 50 años, es reconocido no solo como un destacado triatleta de la zona, sino también como profesor de kinesiología profundamente comprometido con sus estudiantes y con el desarrollo del deporte regional.

Su conexión con la actividad física no fue casualidad. Desde niño, Claudio encontró en el movimiento y la competencia un espacio para descubrirse, formarse y avanzar. Sus primeras vivencias deportivas lo llevaron a representar al país en el Mundial de BMX de 1987, cuando apenas era un joven que ya comenzaba a mostrar su temple competitivo.

Más tarde, sobresalió como nadador universitario, alcanzando el reconocimiento como "Mejor Deportista" de la Universidad de La Frontera en el año 2000. Ese galardón marcó un hito: por primera vez un nadador obtenía aquel mérito, abriendo un camino que él mismo seguiría recorriendo.

A sus 50 años, Claudio Soto Espíndola sostiene un rendimiento deportivo respaldado por décadas de entrenamiento sistemático. El triatleta y académico de la Universidad Santo Tomás ha superado lesiones, accidentes y periodos de rehabilitación aplicando criterios de preparación física, planificación anual y autocuidado propios del alto rendimiento. Hoy continúa compitiendo en pruebas regionales y nacionales, representando a Los Ángeles con un nivel que refleja tanto su formación profesional en kinesiología como la disciplina que ha marcado su carrera deportiva.

EL TRIATLÓN COMO DESTINO

Con los años, Claudio encontró en el triatlón su identidad deportiva. Una disciplina exigente, que demanda equilibrio mental, fortaleza física y una inquebrantable capacidad de sacrificio. A lo largo de 14 años dedicados a esta especialidad, ha sumado participaciones internacionales que muestran la huella de un deportista completo: Mundial de Triatlón Australia 2016, Mundial de España 2019, clasificación al Mundial de Ibiza 2022 y nuevamente a Australia 2024. En estos dos últimos no pudo viajar, pero la clasificación en sí ya habla de su talento, vigencia y constancia.

Sin embargo, su carrera no solo ha estado marcada por triunfos y metas deportivas cumplidas. También ha debido enfrentar momentos duros, de esos que ponen a prueba no solo el cuerpo, sino el alma.

CAERSE, LEVANTARSE, AVANZAR

En octubre de 2020, una caída en bicicleta le provocó una fractura de la escápula en su hombro derecho. Un golpe devastador que, para muchos, podría haber significado el final de una etapa. Pero Claudio no conoce el concepto de rendirse. Desde la rehabilitación —apoyado en su formación y en el mismo deporte que ama— volvió a construir su camino, movimiento a movimiento, hasta recuperar completamente su capacidad competitiva.

Tres años después, en 2023, a fines de octubre, vivió otro episodio complejo. Había viajado a Viña del Mar como voluntario para los Juegos Panamericanos en la disciplina de Triatlón, cuando su vehículo sufrió una falla mecánica que terminó en un violento volcamiento. Su camioneta quedó prácticamente destruida, pero él y su esposa salieron con vida. Aunque no hubo consecuencias físicas graves, la experiencia dejó un impacto emocional que también tuvo que superar.

El más reciente de estos episodios ocurrió en febrero del presente año, cuando fue atropellado mientras circulaba en bicicleta por la localidad de Santa Fe. El conductor huyó del lugar. Nuevamente el dolor, la impotencia y la incertidumbre. Pero también, nuevamente, la resiliencia.

En cada caída, Claudio encontró un motivo para renacer. Y es ahí donde su historia se transforma en inspiración.

"EL DEPORTE ES MI VIDA"

Con la serenidad de quien ha vivido y ha aprendido aún más, Claudio reflexiona sobre el sentido que el deporte tiene en su historia. "Para mí, el deporte ha sido fundamental en mi vida, ha sido el soporte para mi realización como persona", cuenta en conversación con La Tribuna.

Agrega en este emotivo diálogo, que en el alto rendimiento no existe camino fácil: "Para ser deportista de alta competencia debes tener constancia, dedicación y mucha perseverancia. Es una lucha diaria, y en la que el apoyo de la familia es fundamental".

Para él, la vocación siempre estuvo clara. "Desde muy joven sabía que tenía que seguir la carrera de Educación Física, y luego debía continuar con kinesiología. Me quedé hartos años estudiando por mi pasión con la natación", recuerda.

Claudio también ha transmitido esta pasión a sus hijos. Su hijo menor ingresó recientemente a la Universidad de La Frontera como deportista destacado.

Su hija también le sigue los pasos en el deporte, aunque el vóleibol es su gran pasión, saliendo campeona nacional en los Juegos Escolares.

"Gracias al deporte he desarrollado habilidades de trabajo en equipo, de empatía, esfuerzo, resiliencia y superación. El deporte es todo en mi vida", sentencia.

UN PRESENTE QUE SIGUE EN MOVIMIENTO

Hoy, a sus cinco décadas, Claudio Soto Espíndola sigue entrenando, enseñando y compitiendo. Este fin de semana participó junto al equipo Full Runner en una competencia de ciclismo en Puerto Varas.

Su historia es un recordatorio de que los verdaderos deportistas no se miden solo por sus medallas, sino por su capacidad de levantarse una y otra vez. Claudio Soto es, sin duda, uno de ellos: un hombre que ha hecho del esfuerzo un estilo de vida y que lleva tatuado en su historia el valor de no rendirse nunca.

Claudio Soto y su hijo menor Martín Soto, fueron galardonados por la municipalidad de Los Ángeles a fines de mayo del 2024 / La Tribuna
Claudio Soto y su hijo menor Martín Soto, fueron galardonados por la municipalidad de Los Ángeles a fines de mayo del 2024 La Tribuna

Gracias al deporte he desarrollado habilidades de trabajo en equipo, de empatía, esfuerzo, resiliencia y superación / La Tribuna
"Gracias al deporte he desarrollado habilidades de trabajo en equipo, de empatía, esfuerzo, resiliencia y superación La Tribuna

Síguenos: Google News
banner redes
banner redes banner redes banner redes banner redes banner redes

¿Quieres contactarnos? Escríbenos a [email protected]

Contáctanos
EN VIVO

Más visto