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La Tribuna

Entérese de cómo puede evitar el efecto rebote después de hacer dieta

por Sebastián Díaz

¿A quién no le ha pasado que, tras cuidarse, termina recuperando e incluso aumentando los kilos bajados con tanto esfuerzo? Aquí te daremos algunos tips.

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El efecto rebote es la consecuencia de perder peso muy rápidamente. Si ya has hecho una dieta rápida, te habrás dado cuenta que es muy fácil recuperar parte del peso perdido con tanto esfuerzo en apenas unos días. Y da mucha rabia. En este artículo puedes aprender cómo evitar el efecto rebote.

La verdad es que el 97% de las personas que hacen una dieta, ganan peso muy rápidamente.

Esto ocurre especialmente con las llamadas dietas de choque, que son aquellas donde se pierde peso muy rápidamente y son muy extremas. Sobre todo las que limitan el consumo de calorías a menos de 1000 diarias. Este tipo de dietas alteran el metabolismo, y el cuerpo reacciona con un exceso de compensación. Sabe que tiene poco alimento y ahorra todo lo que puede.

Entre otras medidas produce menos hormonas tiroideas, lo que favorece la recuperación del peso perdido, y libera otras hormonas estimulantes del apetito, como la grelina.

Por otro lado no se puede estar sometido de por vida a las dietas. Debes aprender a comer para estabilizarte en un peso y no sufrir el efecto rebote constantemente.

Si no quieres someter a tu cuerpo a un efecto yo-yo (me desinflo y me vuelvo a inflar) y quieres conocer cómo evitar el efecto rebote, te aconsejo que leas este artículo hasta el final. En él vas a poder ver por qué se produce, y cómo evitar el efecto rebote.

¿CÓMO EVITAR EL EFECTO REBOTE Y ADELGAZAR?

No es tan difícil perder el exceso de grasa corporal. Pero ten en cuenta una cosa: según sea la dieta perderás grasa o músculo o agua. Lo ideal es perder el exceso de grasa corporal sin sacrificar el tejido muscular. Cuando se pierde el músculo en una dieta es cuando se favorece un retorno rápido de peso.

Perder peso en una semana: Después de lo que has leído te habrás dado cuenta que lo mejor, para evitar el efecto rebote, es no hacer una dieta demasiado baja en calorías. Lo ideal es hacer una dieta que te permita bajar un kilo a la semana. Esto permite que el cuerpo y el cerebro se adapten mejor a la pérdida de peso, y garantiza un menor efecto rebote.

Los medicamentos para adelgazar ¿Ayudan a evitar el efecto rebote? Pues sí. Los medicamentos que luchan contra la obesidad  ayudan a mantener el peso después de una dieta. Especialmente los que inhiben la absorción de grasa, la efedrina y la cafeína.

COMO EVITAR EL EFECTO REBOTE: CON LAS DIETAS DE PROTEÍNAS

Una dieta alta en proteínas ayuda a mantener la masa magra, un componente clave para mantener el peso perdido, tal y como ya hemos visto. Además, las dietas altas en proteínas son una herramienta efectiva para eliminar el efecto rebote. Una ingesta alta de proteínas (al menos un 30% del total de todo lo que comes) no sólo te ayuda a mantener la masa muscular, también aumenta la sensación de saciedad, lo que te ayuda a evitar comer en exceso.

Al hacer una dieta, siempre se está restringiendo algún alimento. Los que se suelen eliminar (o reducir mucho) son los hidratos de carbono y las grasas. Justo los nutrientes que nos proporcionan la energía, lo que, aparte de provocar cansancio, puede provocar la pérdida de músculo.

Come alimentos con poco azúcar: El consumo de alimentos con poco azúcar, o alimentos que no estimulan un alto nivel de glucosa en la sangre, también ayudan a evitar los efectos del rebote de peso. Además, estos alimentos son, más a menudo, muy ricos en fibra, lo que a su vez te proporciona un efecto de saciedad.

Un día a la semana para comer lo que quieras: Tómate un día libre para comer lo que más te apetezca (aunque cuidado con las cantidades). Si te privas de todo y todo el tiempo, con el tiempo te cansarás y volverás a comer lo que te produjo sobrepeso.

Realiza ejercicios de resistencia: El ejercicio de resistencia, (las pesas, el fitness) implican a los grupos de músculos más grandes y durante su entrenamiento se produce un mayor nivel de intensidad muscular. Esto activa el metabolismo en estado de reposo y ayuda a prevenir la recuperación de la grasa perdida.

Varias comidas al día: Incorpora el hábito de comer porciones pequeñas y no repitas. Tampoco te saltes ninguna comida. Lo ideal es hacer de 5 a 6 comidas al día. Lleva contigo algún aperitivo o merienda sanos, a modo de equipo de emergencia, así no caerás en tentaciones y no compraras lo primero que veas.

Bebe mucha agua: Bebe muchos líquidos, si puedes llevar contigo una botella de agua mineral, te va a ayudar a saciarte, además de ser muy saludable y desintoxicante.

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