Un intenso despliegue de personal técnico, municipal y de emergencia tuvo lugar este jueves en distintos puntos de la provincia de Biobío, luego de que un nuevo sistema frontal descargara más de 120 milímetros de precipitaciones en menos de 24 horas.
La situación ha complicado el panorama especialmente en la capital provincial, dado que se ha generado un complejo escenario en materia de infraestructura, conectividad y cauces fluviales.
DESBORDES DE ESTERO Y CORTES DE CAMINO
Las lluvias que ya habían sido pronosticadas han generado desbordes en esteros, deslizamientos de tierra y cortes temporales de caminos, lo que obligó a activar alertas rojas y labores de emergencia.
Estas fueron coordinadas con la Delegación Presidencial Provincial, el Ministerio de Obras Públicas (MOP) y las direcciones de Obras Hidráulicas (DOH) y General de Aguas (DGA), además de las municipalidades afectadas y otros organismos.
Según explicó el seremi del MOP en Biobío, Hugo Cautivo Baltierra, el principal foco de preocupación han sido los cuerpos de agua en las comunas de Los Ángeles y Mulchén, particularmente, por la situación de los esteros Quilque, Paillihue, Bolsón y Tolpán, los cuales han registrado crecidas significativas.
En el caso del estero Paillihue, se declaró Alerta Roja por parte del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) durante las últimas horas, luego de que se observaran signos de rebalse que podrían haber comprometido viviendas cercanas.
El trabajo conjunto entre el MOP, las municipalidades y las direcciones técnicas ha permitido disminuir los impactos. Se contabilizan cerca de 150 estaciones activas de monitoreo fluviométrico e hidráulico a lo largo de la región, las que entregan datos en tiempo real para tomar decisiones rápidas ante posibles emergencias.
DESLIZAMIENTOS Y AFECTACIÓN EN RUTAS CLAVE
En esa misma línea, la autoridad de la cartera dio a conocer que el frente climático también provocó problemas de conectividad en la provincia, donde la situación más crítica afectó a la ruta Q-61-R, que une Santa Bárbara con Alto Biobío. Esta última registró un corte total en la zona de la cuesta Mininco, debido a un deslizamiento mayor de tierra ocurrido durante la noche.
Asimismo, se reportaron deslizamientos menores en la Ruta 5 Sur, lo que obligó a realizar segregaciones preventivas en algunos sectores por inestabilidad en taludes. La sociedad concesionaria de la autovía ha trabajado en conjunto con equipos del MOP para mantener la circulación activa y segura.
En la Ruta de la Madera, que también fue afectada por el temporal, se registró la caída de un árbol y un deslizamiento de tierra en el kilómetro 19,5, ambos atendidos por cuadrillas del contrato global a cargo de esa vía. A pesar de las complejidades, no se produjo un corte total de tránsito, por lo que el flujo ha sido monitoreado constantemente.
En el sector de Choroico, en la comuna de Nacimiento, se produjo un pequeño deslizamiento de tierra hacia la ruta, que fue intervenido por la Dirección de Vialidad durante este jueves. De manera general, se han registrado otras afectaciones menores en caminos rurales, sin interrumpir completamente la circulación.
TRABAJO PERMANENTE Y EVALUACIÓN POSITIVA
Pese a la intensidad de las precipitaciones, las autoridades evalúan positivamente la respuesta del sistema de protección fluvial e infraestructura.
Desde el MOP se ha indicado que las precipitaciones continuarán en menor intensidad hasta el sábado, por lo que se mantendrán activos los equipos de emergencia, especialmente en sectores con mayor presencia de vegetación forestal y pendientes pronunciadas, como es el caso de las rutas hacia Tomé y la propia Ruta de la Madera, que históricamente han presentado dificultades ante lluvias intensas combinadas con viento.
