Regístrate en nuestro newsletter
Cerca de 390 viviendas resultaron dañadas en todo el territorio y más de 100 emergencias fueron registradas solo en Los Ángeles durante la primera noche.
Elio Brufort, meteorólogo de la Dirección Meteorológica de Chile, calificó el evento como "un sistema frontal intenso" que dejó precipitaciones de hasta 120 milímetros en menos de 12 horas en las estaciones de la costa, específicamente, en la provincia de Arauco.
No obstante, el especialista clarificó que la mayoría de los puntos de medición distribuidos a lo largo de la región registraron "entre 80 y 100 milímetros".
La intensidad destructiva del fenómeno se debió a factores atmosféricos específicos.
El meteorólogo detalló que "el viento se originó por contraste térmico entre las masas de aire". En ese marco, explicó que la gran diferencia de temperatura entre las masas de aire prefrontal —de tipo cálida— y postfrontal —más fría— aumentó la intensidad del viento.
"También ocurre cuando un sistema frontal tiene un centro de presión muy bajo, lo que genera un alto contraste que igualmente se traduce en una intensificación del viento", agregó.
Brufort aclaró que el evento no constituye anomalía alguna: "Es poco común, pero esperable dentro de los sistemas frontales, razón por la cual estuvo vigente una alerta meteorológica en la región".
Asimismo, el experto enfatizó que este tipo de eventos se analizan de forma puntual, ya que cada sistema frontal tiene características únicas.
Los primeros embates del frente de mal tiempo comenzaron a sentirse con violencia desde la tarde del pasado sábado. En 12 horas cayeron cerca de 41 milímetros de agua, acompañados por ráfagas de viento que superaron los 90 km/h.
Lo anterior motivó al municipio de Los Ángeles a activar, ya cerca de la noche de ese día, un puesto de mando en avenida Las Industrias, que coordinó acciones con las direcciones de Seguridad, Medio Ambiente y Ejecución de Proyectos.
La Alerta Amarilla de levantada por el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) evolucionó rápidamente a Alerta Roja durante la madrugada del domingo, cuando el número de emergencias se multiplicó debido a que el viento arreció hasta alcanzar rachas de 110 km/h, aunque con precipitaciones con tendencia a la baja.
Ante la gravedad de la situación, se decretó el acuartelamiento general del Cuerpo de Bomberos de Los Ángeles, medida que buscaba asegurar una respuesta eficaz frente a los constantes llamados de auxilio.
Cerca de las 20:00 horas del sábado, un corte masivo dejó a oscuras aproximadamente 25 mil hogares angelinos, lo que afectó a sectores como Paillihue, Villa Los Profesores, Camino a Cerro Colorado, Camino a Antuco y la Ruta Nahuelbuta. Las zonas rurales fueron las más castigadas, y algunas permanecieron sin energía hasta el día siguiente.
El problema se replicó en otras comunas de la provincia. Esa noche, Nacimiento registraba 11 mil hogares sin luz, Mulchén más de 10 mil, Tucapel cerca de 7 mil 335, Santa Bárbara alrededor de 6 mil y Cabrero más de 5 mil.
Según se reportó durante la mañana del domingo, el viento huracanado provocó la caída de 68 árboles y tres postes del tendido eléctrico solo en Los Ángeles, lo que generó apagones masivos.
Durante el peak del sistema frontal, más de 40 mil viviendas de la capital provincial quedaron sin suministro eléctrico.
Según datos de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC), la región del Biobío alcanzó un total de 198 mil clientes sin electricidad y, hasta la mañana del domingo, más de 159 mil usuarios continuaban sin servicio, con Los Ángeles manteniendo una afectación de 38 mil clientes.
Los árboles arrancados de raíz obstaculizaron calles y rutas de la provincia. En Los Ángeles, las arterias más afectadas fueron Camino a Cerro Colorado, José Santos Caro, Manuel Rioseco, Freire, Camilo Henríquez, José Manuel Infante, Sor Vicenta y Camino a Antuco, donde el paso quedó completamente bloqueado por troncos de gran tamaño.
Un incidente grave se registró en la Ruta 146, que une Cabrero con Concepción, cerca de las 21:00 horas del sábado, cuando un árbol cayó sobre un automóvil en movimiento, lo que dejó al conductor con lesiones.
En el camino a Santa Bárbara, otro árbol se desplomó sobre una persona en el kilómetro 3,5, lo que generó una alta congestión vehicular y cortes de luz generalizados.
Una situación similar ocurrió en el sector Cachapoal de la Ruta Q-20 que une Laja con Los Ángeles, donde árboles cortaron la ruta y, producto de la escasa visibilidad, el despeje debió posponerse hasta las 8:00 horas del domingo. Hasta entonces, Carabineros debió apoyar con medidas de seguridad.
La situación también se tornó crítica fuera de la provincia, dado que el Ministerio de Obras Públicas (MOP) ordenó el cierre de la Ruta de la Madera entre las 23:00 horas del sábado y las 07:00 horas del domingo.
La medida abarcó 26 kilómetros desde el Puente Bicentenario hasta el Cruce Patagual, permitiendo el acceso solo a residentes y equipos de emergencia.
"La decisión de suspensión tiene que ver con prevenir accidentes, sobre todo porque entre las 23:00 y las 05:00 horas viviremos el momento peak de este frente climático", explicó en esa oportunidad el seremi de Obras Públicas del Biobío, Hugo Cautivo.
El balance regional entregado por el delegado presidencial regional, Eduardo Pacheco, reveló cifras contundentes: 389 viviendas resultaron afectadas, de las que 365 sufrieron daños menores, 19 daños mayores y cinco fueron completamente destruidas.
De estas últimas, cuatro se ubicaron en Concepción y una en Lota. En total, el frente de mal tiempo afectó directamente a 2 mil 967 personas.
En la provincia del Biobío, el delegado presidencial Javier Fuchslocher reportó 30 viviendas con daños menores por voladuras de techos, que se concentraron principalmente en Los Ángeles, además de un caso de daño estructural grave en Cabrero, donde los equipos municipales se desplegaron inmediatamente.
Un caso extremo se registró en el sector rural Variante 1 de Los Ángeles, donde un árbol de gran tamaño se desplomó sobre una vivienda, destruyendo completamente su techo y comprometiendo un muro principal.
En Santa Bárbara, un incendio consumió por completo una vivienda y una camioneta en el sector La Peña, originado por el recalentamiento de una estufa.
Desde la Delegación Presidencial Provincial destacaron que la planificación previa resultó crucial. Los trabajos preventivos realizados en esteros y canales clave como el Tolpán, Payíhuay y Quilque evitaron desbordes mayores en sectores colindantes.
"Gracias a las limpiezas de ribera y mantenimiento realizados previamente, ninguno de esos cursos de agua se salió de su cauce, a pesar de la gran cantidad de lluvia caída", señaló Fuchslocher.
El gobernador del Biobío, Sergio Giacaman, hizo un llamado a reforzar la coordinación para prevenir emergencias en futuros inviernos.
Giacaman subrayó la importancia de priorizar los planes de evacuación de aguas lluvias: "El MOP debe priorizar estos proyectos, y a nivel regional estaremos disponibles para colaborar con los municipios. Si abordamos este tema ahora, lograremos que los próximos inviernos sean muy distintos".
Desde la Dirección Meteorológica de Chile, Elio Brufort detalló que este lunes la región será afectada por "una banda secundaria, con chubascos muy débiles y nubosidad, lo que permitirá que las temperaturas no sean tan bajas".
Sin embargo, a partir del martes se esperan mínimas de 5°C, las que podrían bajar uno o tres grados más en las zonas rurales de la provincia. La máxima sería de solo 11°C.
Respecto a la probabilidad de precipitaciones, podrían registrarse "precipitaciones muy débiles hasta el martes. Después de eso, la semana se presenta con cielo soleado y bajas temperaturas matinales".
En cuanto al miércoles y el jueves, se espera, con la llegada de la masa de aire postfrontal, "mínimas cercanas a los 0°C e, incluso, algunas negativas. En tanto, las máximas rondarán los 12°C", precisó el Brufort.
 |
||||
 |
 |
 |
 |
 |
¿Quieres contactarnos? Escríbenos a [email protected]
ContáctanosOpinión
