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La Armada de Chile ha confirmado que, tras dos semanas de intensas operaciones, concluyen los esfuerzos de búsqueda de los siete pescadores desaparecidos en el siniestro de la embarcación Bruma.
A pesar de los exhaustivos trabajos realizados por el buque científico Cabo de Hornos, que mapeó detalladamente la zona de interés, no se logró ubicar los cuerpos de los tripulantes. Solo se hallaron restos metálicos pertenecientes a la nave hundida.
La situación mencionada ha dejado a las familias de los desaparecidos con un profundo pesar, pero también con la necesidad de cerrar un capítulo doloroso.
Por lo anterior es que, este miércoles, se llevará a cabo una emotiva ceremonia de despedida a bordo del buque auxiliar Janequeo. En el acto, estarán presentes capellanes de las diferentes confesiones religiosas, quienes ofrecerán sus oraciones en respeto a las creencias de cada uno de los pescadores.
En paralelo, el Gobierno ha tomado medidas judiciales frente al trágico suceso. A través de una querella, se busca determinar responsabilidades bajo la figura de homicidio por omisión de auxilio, en un intento por esclarecer los hechos y buscar justicia para los afectados.
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