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La Tribuna

Acusan agresión verbal en las inmediaciones del hospital de Los Ángeles

por Nicolás M.

La denuncia recopilada por el equipo de prensa da cuenta de un hecho que terminó por involucrar a una mujer de 90 años, quien padece de demencia tipo Alzheimer.

Hospital Dr. Víctor Ríos Ruiz / Archivo La Tribuna

Considerablemente afectada por lo que ella misma denominó un "maltrato verbal", llegó hasta diario La Tribuna Ada Castillo, angelina de 54 años, quien denunció una tensa situación vivida en las inmediaciones del Complejo Asistencial Dr. Víctor Ríos Ruiz en la comuna de Los Ángeles. Un hecho en el que se vio involucrada la madre de la denunciante, quien está en situación de discapacidad.

Los acontecimientos tuvieron lugar durante la mañana del jueves 11 de mayo, cuando Ada Castillo iba a una cita médica, fijada para las 08:30 horas en el Centro de Diagnóstico Terapéutico (CDT) del hospital angelino. De acuerdo con lo detallado por la denunciante: "Llegué media hora antes de lo que se me había solicitado en compañía de mi mamá, de 90 años (...) Soy hija única, por lo que solo yo me encargo de llevarla a sus controles".

La problemática se originó cuando la denunciante no encontró estacionamiento para poder ingresar al recinto de salud, un tema complejo si consideramos que la madre de la agredida se encuentra en situación de discapacidad y debe utilizar un bastón para su desplazamiento habitual. "Traté de conseguir un estacionamiento conversando con los guardias, pero a pesar de mis explicaciones me dijeron que dejará a mi mamá sola ahí y que fuera a buscar estacionamiento fuera del recinto", añadió Castillo.

Esta última acción sugerida por el personal de seguridad no era viable para la denunciante quien detalló que su madre padece de demencia. Una afirmación comprobada de acuerdo con el certificado médico entregado por Christian Figueroa, neurólogo del Complejo Asistencial, que detalla un diagnóstico de demencia tipo Alzheimer. Además, dentro del documento oficial se manifiesta que "el paciente presenta incapacidad laboral desde el punto de vista neurológico de 90 %, globalmente es superior al 90 %".

"La respuesta que más me dieron entre los presentes fue ‘No es mi problema’ (...) En eso aparece una señora muy amable y me dice: ‘No se preocupe yo le cuido a la mamita mientras usted se va a estacionar", contó. Al no haber espacios disponibles para parquear, Castillo tomó la decisión de utilizar un estacionamiento preferencial y los hechos escalaron rápidamente.

"Un guardia me comenzó a gritar amenazas de que iban a llamar a Carabineros por no portar credencial. Por lo mismo, y a pesar de la forma en que me trató, le explique que venía, precisamente, a que me timbraran el papel para obtener la credencial (...) Al final estacioné la camioneta y volví rápidamente a buscar a mi mamá, pero cuando voy llegando se me acerca una persona vestida de negro diciéndome que sacara el vehículo", narró la afectada.

"Luego de un maltrato verbal en que el sujeto me dice ‘aquí no está en su fundo para estacionarse donde quiera’, le respondí que si llaman a Carabineros iba a estar en Neurología", agregó. Sin embargo, de nada iba servir esta aclaración, puesto que mientras la afectada se encontraba en la cita médica, personal de Carabineros le cursó un Parte Empadronado.

Una acción argumentada en que, tal como explica el Servicio Nacional de la Discapacidad (Senadis), cualquier vehículo que utilice un estacionamiento preferente debe "dejar la credencial de discapacidad al interior del vehículo, visible, en el costado inferior izquierdo del parabrisas delantero".

No obstante, consciente del hecho, la denunciante centró su reclamo en "la violencia injustificada" con la que fue tratada. "Yo soy una persona educada, y no comprendo la violencia injustificada y la falta de respeto con el adulto mayor (...) Los viejos se han sacado la cresta para sacar adelante a este país y ni siquiera tienen derecho a un estacionamiento en caso de emergencia", añadió Castillo.

Finalmente, mientras que Ada Castillo se encuentra, por un lado, en proceso de saldar el parte cursado y, por otro lado, en pleno trámite para obtener la credencial de discapacidad de su madre, desde el recinto de salud aludido no hubo pronunciamiento. Vale destacar que la afectada hizo el reclamo correspondiente a través de la Oficina de Información, Reclamos y Sugerencias (OIRS), por lo que debería obtener una respuesta en los próximos días.

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