Representantes de productores apícolas a nivel nacional, a través del Movimiento Nacional de Apicultores de Chile (MONACHI A.G.) destacaron las características del país para impulsar la exportación de material genético a mercados internacionales de alta demanda, como Canadá.
Dicho hito fue llevado a cabo por el gremio, con la exportación de paquetes de abejas a Canadá, para avanzar en el posicionamiento del país como exportador de productos no tradicionales con valor agregado.
Por lo anterior llamaron a avanzar en un marco normativo para la exportación de material biológico, con laboratorios y capacitación continua de técnicos apícolas calificados.
Desde el Movimiento Nacional de Apicultores de Chile (MONACHI A.G.), explicaron que Chile "emerge como un actor clave en el mercado global de exportación de material genético apícola, con un liderazgo en la producción y envío de reinas de abejas".
El gremio destacó que
el país cuenta con un "singular aislamiento geográfico, la implementación de rigurosas normativas sanitarias y una arraigada tradición apícola han convertido al país en el principal reservorio genético de esta especie".
A nivel internacional, el movimiento apícola precisó que los buenos precios pagados por paquete de abejas exportados a otros países se dan gracias a "factores como la pureza genética, las certificaciones sanitarias y los costos logísticos asociados".
El presidente de MONACHI A.G., Mario Flores Chávez, apuntó a que "Canadá se presenta, en este contexto, como un mercado de alta demanda, particularmente por abejas que demuestren una robusta resistencia sanitaria y una óptima adaptación a climas fríos".
Por otra parte, el director ejecutivo de ProChile, Ignacio Fernández, observó que "la exportación de abejas liderada por MONACHI A.G. ilustra el potencial de Chile para erigirse como un proveedor de productos no tradicionales con un significativo valor agregado".
Uno de los hitos que marcó la posibilidad para los exportadores se mostró en la delegación chilena que viajó a Canadá en 2024, organizada por el movimiento apícola, concretando el envío de más de 1.200 paquetes de abejas.
La gestión logística implementada para la exportación de los paquetes de abejas integró sistemas de monitoreo de temperatura y control de ventilación, embalaje especializado y un seguimiento puerta a puerta.
La operación, según MONACHI, plantea el próximo gran desafío del sector: la necesidad de escalar la producción de abejas reinas certificadas respetando la calidad y protocolos de bioseguridad que caracterizan a Chile.
El Movimiento Nacional de Apicultores de Chile consideró que para lo anterior "se requiere la consolidación de alianzas estratégicas entre el sector público y privado, el fortalecimiento continuo de los programas de trazabilidad genética y la exploración activa de nuevos mercados".
Llamaron también a "establecer un marco normativo actualizado y robusto para la exportación de material biológico
, que incluya estándares sanitarios claros y protocolos logísticos simplificados que faciliten el acceso eficiente a nuevos destinos internacionales".APICULTORES LLAMAN AL ESTADO A INVERTIR EN CERTIFICACIÓN
El gremio diagnosticó que, para esto los pasos a seguir por parte de la autoridad silvoagropecuaria estatal deberían apuntar a "avanzar con determinación en la implementación de laboratorios de diagnóstico genético de vanguardia, sistemas de certificación de origen confiables y programas de vigilancia sanitaria exhaustivos que fortalezcan la reputación de sus productos en el extranjero".
Se debería sumar a esto, de acuerdo con lo expresado por MONACHI A.G., "la capacitación continua de técnicos apícolas altamente calificados y la digitalización progresiva de las cadenas productivas".
El movimiento apícola nacional cerró proyectando que, para el caso de la exportación de material genético en el hemisferio sur "la experiencia en Canadá durante 2024 representó un punto de inflexión crucial para la totalidad del sector apícola".
Con los avances, el gremio espera que "esta prometedora oportunidad tenga el potencial de transformarse en una industria de alto valor agregado que beneficie a cientos de productores a lo largo de todo el territorio chileno, consolidando a Chile como un referente mundial en genética apícola".