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Obedeciendo las instrucciones emanadas del Alto Mando Institucional, se realizó el viernes y sábado recién pasado un Servicio Policial Extraordinario, encabezado por el prefecto de Biobío, teniente coronel John Polanco Espinoza, que contempló a la totalidad de los servicios especializados de la repartición y el máximo de Carabineros de las cinco unidades.
El objetivo de estas actividades según lo indicado por la institución fue “para enfrentar adecuadamente la problemática delictual del país, como, asimismo, aumentar los niveles de prevención y eficacia policial frente al delito”.
El accionar de Carabineros estuvo enfocado en los puntos críticos de reincidencia, considerando aspectos situacionales y espaciales de acuerdo a los análisis georeferencial del comportamiento delictual.
Además, este servicio contó con el apoyo del Servicio de Impuestos Internos, Inspectores Municipales y Bomberos, con la finalidad de fiscalizar e inspeccionar a locales supeditados a la Ley Nº19.925.
RESULTADOS
Se detuvo a 48 personas por órdenes de aprehensión pendientes, 22 por la ley 20 mil de drogas, 10 personas por hurto y a 5 por conducir en estado de ebriedad.
El total de detenidos por las más diversas causas fueron más de un centenar, destacando que existe uno por abuso sexual.
En las infracciones destacan 329 cursadas por no respetar la ley de tránsito y 34 por ingerir alcohol en la vía pública.
Finalmente, se controlaron casi tres mil vehículos, e igualmente se realizaron más de 3 mil controles de identidad que tuvieron como resultado dar con el paradero de personas buscadas por la ley por delitos de diversa índole.
También se fiscalizaron locales de venta de alcohol y comercio en general.
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