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La Tribuna
Columnista

Un día necesario para recordar la historia y mejorar el presente

Jorge Rivas Figueroa

Administrador Público
Licenciado en Ciencias Políticas

por Jorge Rivas Figueroa

El día internacional de la NO violencia contra las mujeres cumple 23 años, luego que la Organización de Las Naciones Unidas, bajo la idea de crear conciencia, determinara que el 25 de noviembre del año 2000 sería la fecha para la conmemoración del asesinato de las hermanas Mirabal a manos de Rafael Trujillo, dictador dominicano que ordenó su brutal homicidio.

Patria, Minerva y María Teresa murieron un 25 de noviembre de 1960. Las Mirabal o Las Mariposas son heroínas en su país, el que las conmemora con un mausoleo declarado extensión del Panteón Nacional  y con la Provincia - una de las 32 de República Dominicana - que lleva por nombre "Hermanas Mirabal".

La idea de estas conmemoraciones está muy clara en la historia de las discusiones de la ONU, que podemos remontar a 1979, cuando se consigue la aprobación de una convención cuyo objetivo final era eliminar todo tipo de discriminación contra la mujer, según reza en los textos del organismo multilateral. Ya en 1993, es decir 14 años más tarde, los países del mundo, agrupados en las Naciones Unidas, presentaron la Declaración de la eliminación de la violencia contra la mujer".

Hoy, recuerdo las enseñanzas de mi madre, de mis hermanas, veo a mis vecinas, a mis compañeras de trabajo y me detengo a pensar cómo hemos causado daños, porque soy hombre, pero uno que busca a diario frenar este flagelo, condenando a mis pares de género sin miedo, porque no existe mayor cobarde que el que golpea a los y las débiles; física, sicológica y emocionalmente (hay más tipos de violencia, claro está, pero se usan esta como ejemplo).

Pese a que he luchado contra ella, al punto de sostener programas estatales dependientes de Sernameg para ir en ayuda de las mujeres de mi comuna que sufren las agresiones al interior de sus familias, en los pololeos, en los trabajos y hasta en la calle con "piropos" mal entendidos que las denigran, lo cierto es que hoy atendemos a cerca de 200 mujeres que sufren a diario distintos tipos de agresiones, variadas formas de violencia.

37 femicidios durante 2023 en Chile (nos queda un mes y medio para el fin de este año), y digo, femicidio es el nombre que determinó la justicia para las mujeres asesinadas en el marco de las relaciones de pareja y familiares, y sepa usted que asesinarlas, sigue teniendo penas más bajas que un el crimen de incendio, lo que quiero decir es que no debieran existir atenuantes y que la sola agresión, verbal o física, debiera partir de una pena alta. Ciertamente, se debe discutir en el parlamento esta situación que sigue viviendo en un Estado que se mantiene machista, en esta materia. Leyes duras, es lo que se necesita para asustar al cobarde.

Mulchén ha encabezado en el pasado las estadísticas de violencia de género y de violencia intrafamiliar en la Provincia de Biobío y por ello consideré necesario la existencia del "Programa de prevención, atención y protección de violencia contra la mujer" que es un modelo de intervención que funciona bajo el alero municipal, pero que nace en Sernameg y que nos permite auxiliar y apoyar a nuestras vecinas y sepa Usted que lo hacemos sin que sea un obligación, lo hacemos porque es un deber, una responsabilidad, o si quiere mi necesidad de terminar con esto.

Tenemos un equipo multidisciplinario completo, con abogadas/os, sicólogas/os, trabajadoras/es sociales, que hoy por ejemplo, se han tomado la municipalidad con el color morado, con actos y con intervenciones que recuerdan que todos y todas somos iguales y que la violencia (de la que hoy hablo) es una que se suma a las agresiones que sufren nuestros niños y niñas, nuestras minorías sexuales y étnicas, por dar el ejemplo. Si bien, el 25 de noviembre tiene un objetivo, se me hace imposible no recordarlo todo en estas líneas.

Las Hermanas Mirabal dieron la vida por las injusticias que vivía su pueblo, son un verdadero ejemplo de resistencia y de amor al prójimo y su muerte podría ser aún más significativa (en nuestro país) si se enseñara su vida en los establecimientos educacionales, porque esto también se puede frenar educando desde la más temprana edad a nuestros niños y niñas.

Jorge Rivas Figueroa

Administrador Público

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