El 4 de

octubre se celebra el Día Mundial de los Animales en conmemoración de San

Francisco de Asís, santo que nació en 1182 en Italia y que dejó como enseñanza

a la humanidad que debemos comprender cuál es nuestro lugar en la Tierra, ya

que el bienestar de nosotros está integrado al bienestar de todo los animales y

el medio ambiente.

Un mensaje que

hoy más que nunca es bueno recordar y reforzar, sobre todo a las nuevas

generaciones que al parecer, y sin ánimo de generalizar, han perdido el respeto

por quienes también forman parte de nuestro ciclo de vida. 

Esta semana

una repudiable situación se viralizó por redes sociales, un grupo de

estudiantes de la comuna de Santa Bárbara, en nuestra provincia, golpearon

indiscriminadamente a un chivo, hasta matarlo. 

El hecho fue registrado y compartido como una hazaña pintoresca y se

corroboró por sus vestimentas que eran escolares de un liceo de dicha comuna. ¿Cuál

fue el objetivo de tal vil actuar?  Nadie

se lo explica, y de seguro ni los propios jóvenes toman conciencia del daño

causado. Lamentablemente, no es un hecho aislado, videos similares son

recurrentes en redes sociales, la respuesta de repudio social es inmediata pero

la penalización para estos actos es ligera o nula. Sin duda, son casos extremos

que obligan a analizar esos vacíos legales, pero no son tan ajenos del diario

vivir donde muchas familias conviven con una mascota sin proveerle lo básico, y

menos aún responsabilizarse por ello. A raíz de lo mismo, y como una forma de

regular el tema, en nuestro país se impulsó la Ley de Tenencia Responsable de

Mascotas que está en plena marcha, pero con escasa fiscalización aún.

Muchos dirán,

la justicia para los hombres es compleja más aún para los animales. Claramente

es así, los sistemas no funcionan como deberían, pero hay avances. Uno de

ellos, se conoció también esta semana. Se trata de la condena a los autores de

la agresión a mascota que motivó la "Ley Cholito", quienes fueron

sentenciados a una pena remitida de prisión por atacar y abandonar a dos perros

en enero de 2017. Esto claramente marca un precedente, en un tema que toma

fuerza.

Es por ello,

que nunca está de más recordar que aunque somos la especie más evolucionada,

eso no le quita los derechos y protección al resto de los animales del planeta.

Porque tal como le explicaron a Simba en el Rey León, todos formamos parte de

una cadena conocida como el ciclo de la vida, y la destrucción de cualquier

especie genera grandes estragos en la naturaleza.

Por lo mismo,

la mejor forma de celebrar este día, es respetando a todos los seres vivos que

conviven con nosotros en el planeta. También asistiendo o realizando

actividades educativas que promuevan en las generaciones más jóvenes un sano

interés por nuestros amigos los animales. Otra excelente manera, es

compartiendo mensajes que sensibilicen y concienticen al resto de los usuarios

de Internet, sobre los seres peludos, con plumas o escamas, que viven a nuestro

alrededor, pero que no cuentan con conexión wifi para levantar su voz a favor

de sus derechos.