El pasado 16 de abril, asumí el desafío de representar al Ministerio de Educación en la Provincia de Biobío. Estoy convencido de que son muchas las tareas pendientes y desafíos y por los cuales debemos seguir trabajando en conjunto con la comunidad educativa, tal como lo ha señalado el Presidente Sebastián Piñera, Chile lo hacemos todos, esa es la base que guiará nuestra gestión acá en la Provincia, de la que he estado vinculado por más de 20 años, ya que me he desempeñado como docente y directivo, comprometido siempre con el desarrollo de nuestros niños, niñas, jóvenes y adultos.
Diversas son los metas que nos hemos propuesto, una de ellas es sostener la idea de que la gratuidad en la educación superior ha llegado para quedarse, sabemos que es necesario fomentar y avalar el desarrollo de la educación superior técnico profesional, es esta formación la que mueve al país y en donde se concentra la gran mayoría de la educación superior en Chile. Es por ello, que ya hemos presentado el proyecto de ley que busca ampliar la gratuidad al 70% más vulnerable de este sector educativo, pensando en este sector.
El lunes, tras la segunda asignación de beneficios estudiantiles de 2018 del Mineduc, un total de 327.726 personas estudian con gratuidad. De estas, 140.037 corresponden a estudiantes matriculados en alguno de los 13 IP y CFT adscritos, lo que representa al 42,7% de los beneficiados a esta política. Las cifras se actualizarán el próximo 5 de julio, fecha en la que se darán a conocer los resultados del segundo proceso de apelación a las ayudas estudiantiles, que se extenderá hasta el 15 de mayo.
Son casi 20 mil millones de pesos los que se inyectarán en una primera etapa, con lo que el beneficio de la gratuidad en la educación superior técnica profesional alcanzará a unos 167 mil estudiantes. El costo total supera los 300 mil millones de pesos al año.
Casi el 80% de los matriculados en Institutos Profesionales y Centros de Formación Técnica proviene de los siete deciles de ingreso más vulnerables, por lo que con esta medida se está priorizando al grupo que más lo necesita.
Otros de los aspectos en los que hemos puesto nuestro enfoque es la educación parvularia, que juega un rol clave en el desarrollo y en la formación de los niños, permitiendo minimizar las brechas en su desarrollo cognitivo y socioemocional; éstas se producen desde la primera infancia y más aún, persisten en la vida adulta.
Las cifras indican que en Chile, sólo el 18% de los niños entre 0 y 2 años asiste a la sala cuna, mientras en la OCDE, esa cifra es un 33% en promedio; el 54% de los niños y niñas de 3 años va al jardín infantil, mientras en la OCDE es el 71%; y el 78% de los padres de niños y niñas entre 0-3 años que no asisten a educación parvularia, piensa que no es necesario porque los cuidan en casa.
Todas estas metas las iremos desarrollando y liderando desde la Provincia de Biobío, de la mano con los diversos actores educativos, entendiendo la importancia de cada uno de ellos, en los procesos y desafíos que se avecinan, que irán desde la primera infancia, hasta la Educación Superior, asumiendo con la mayor responsabilidad el desafío que significa representar al Ministerio de Educación en Biobío, y con ello llevar a cabo lo expuesto en el programa del Presidente Sebastián Piñera.
Daniel San Martín Jara, jefe Provincial de Educación Biobío.