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El proceso de Reforma Agraria, fue un desastre. No existe, en la historia institucional chilena, una acción más negativa e inútil que esta medida.
Damos vuelta y llegamos al mismo lugar. Es el símbolo de nuestro continente. La semana pasada nos anuncian que el Partido Comunista del Perú, junto a su brazo armado, el Sendero Luminoso, mataron 11 soldados que no iban a la guerra, sólo cumplían funciones de resguardo en el proceso electoral del domingo pasado.
En Argentina, cuya fama en materia de transparencia ha sido por siempre, un problema mayor, hoy es la ex gobernante la que va al banquillo. Uno de sus testaferros, se aburrió y comenzó a hablar de todo. Recuerdo acompañando al Presidente Aylwin en Argentina, que al llegar al hotel de alojamiento, un chileno, con rostro abrumado, se acerca y pide que lo escuchen. Dice que vendió acero chileno al ejército argentino y que ahora, para que le paguen, debe dejar en coimas y demases el 10% de la factura, porcentaje que es su utilidad. Hicimos algunas gestiones y al parecer se solucionó el problema. Nunca supe si se había rebajado la coima o no se pagó.
En Venezuela, un gobernante, el Presidente Carlos Andrés Pérez, lo acusaron de que se había robado un buque. No andaba con cosas menores. Hoy a Maduro y su gente, lo acusan de envíos de millones de dólares a España para apoyar movimientos políticos. El día que este personaje termine o lo saquen de la presidencia, que debe faltar poco, no me cabe duda habrán muchas noticias dramáticas.
En Chile, han comenzado a “reivindicar” la Reforma Agraria. Esto es la manifestación más genuina de que América volvió. Hoy Chile, según la FAO, es el noveno país del mundo en exportaciones alimenticias. Incluso le ganamos a Argentina que se encuentra detrás nuestro en el décimo lugar. El proceso de Reforma Agraria, fue un desastre. No existe, en la historia institucional chilena, una acción más negativa e inútil que esta medida. Los odios, la falta de alimento, el retroceso técnico, en fin, todo lo negativo, fue de tal envergadura que con razón, no se habló de esta ley agraria, durante 40 o más años, sin embargo ahora, está comenzando a recordarse y más grave aún, han surgido alabanzas en lo que fue su aplicación.
En Cuba, su gobierno, que se le fue terminando los países a quienes podían explotar, ahora están con EEUU. Se les terminó Rusia y entraron en una recesión extrema. Ellos, los comunistas cubanos, nunca han logrado alimentar a su pueblo por sí solo. Entonces, miraron a Venezuela que la dejaron esquelética y cuando ya no podían sacarle más, le hicieron un guiño a su adversario eterno EEUU. Era el único que iba quedando. El resto, desaparecieron, con los cubanos, nada.
América Latina, sigue igual. ¿Y serán iguales sus soluciones?
Mario Ríos Santander
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