Suspensión en las exportaciones de carne Argentina no impactaría en el mercado nacional

La suspensión de la exportación de los cortes más populares de carne de vacuno por parte de Argentina a los mercados internacionales no generará inflación de este producto en los precios de la carne en Chile, dijeron los dirigentes gremiales de Fedecarne y la Sociedad Agrícola de Biobío, en entrevista con Diario La Tribuna.  Esto, explicaron, debido a que otros países absorberían la demanda generada por la salida de los cortes trasandinos del mercado nacional.

El presidente de Fedecarne, Ignacio Besoain, dijo a Diario La Tribuna que la medida impactará, aunque no en mayor medida, como país importamos el 65 por ciento de la carne que consumimos, de la cual solo un 12 por ciento proviene de Argentina, porque los principales exportadores de carne a Chile son Paraguay y Brasil y probablemente serán estos mercados los que cubrirán la cuota que sale de Argentina. El dirigente gremial explicó que la medida tomada por el mercado extranjero se dio por políticas internas, para poder manejar el precio para el consumo interno, afectando el libre mercado.  

Según Besoain, la iniciativa desfavorece al negocio de la carne en Argentina, porque presiona para que el producto sea más accesible al público, quitándole rentabilidad, porque es un país que tiene la capacidad de exportar y abastecer su mercado, pero haciendo más caro el consumo y desfavoreciendo el negocio de la carne en Argentina. Desde Fedecarne, Ignacio Besoain dijo que Chile solamente es capaz de cubrir entre el 35 al 40 por ciento del total del consumo de carne de vacuno, por lo que en el corto plazo mercados como Brasil y Paraguay tomarán la cuota del producto argentino, lo que no incidiría en los precios de la carne en Chile. 

NUEVOS MERCADOS 

El académico y docente de la carrera de Auditoría e Ingeniería Comercial del campus Los Ángeles de la Universidad de Concepción e Ingeniero Comercial, Jorge Sandoval, dijo a Diario La Tribuna que cuando un país como Chile firma tratados de integración económica plena con países vecinos, como Argentina, se supone que eso significa dos ventajas para los consumidores: una mayor variedad para que el consumidor pueda elegir, porque el porcentaje mayoritario de la carne que encontramos en el mercado es importado desde Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil, lo que permite y una mayor competencia, que implica mejores precios, porque mientras más opciones tenga el consumidor de dónde elegir, se permite una mejor competencia y los precios. 

Lo anterior traería, según el académico en economía un alza de precios, porque disminuyen las variedades disponibles para los chilenos, vulnerando los tratados de libre comercio y generando perjuicios para el consumidor nacional. Sandoval dijo que, para evitar este perjuicio al mercado nacional, es necesario que la autoridad económica incremente la importación desde otros mercados, pero con tratados de libre comercio se fijan cuotas de cantidades de carne que provengan de un determinado país, por lo que el Gobierno de Chile debe aumentar las cuotas de los otros países que nos abastecen de carne, para evitar la inflación.

SALIDA DE UN ACTOR RELEGADO

El presidente de la Sociedad Agrícola de Biobío (Socabío), José Miguel Stegmeier, dijo a Diario La Tribuna que hoy por hoy, la importación de carne argentina al mercado chileno y particularmente a Biobío, es relativamente poco significativa. Lo anterior, según lo expresado por el dirigente gremial agrícola, debido a que nuestro mercado interno se abastece en primer lugar con carne nacional y los dos principales países que nos exportan carne, son Paraguay y Brasil. A su vez, explicó que también llega algo de Estados Unidos mientras que Argentina, que fue muy relevante en el pasado, este último quinquenio ha ido quedando relegada como país desde el que importamos. Este último país habría variado sus importaciones para este tipo de productos, según el dirigente de Socabio fundamentalmente por razones propias del mercado Argentino.

Producto de lo anterior, Stegmeier dijo que, creemos que si existiera un impacto por la suspensión de la exportación de carne del país trasandino, sería bastante acotado y menor, además de que el posible faltante que pudiera existir, seguramente será rápidamente ofrecido por los países más relevantes desde donde Chile importa carne, Paraguay y Brasil en este caso.