Vivienda Digna: Derecho Humano Esencial

El acceso a la vivienda digna es un derecho humano esencial, y así está consagrado en el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, obligatorio para Chile.

Sin embargo, y a pesar de lo anterior, según el abogado Juan de Dios Parra, en la región del Bío Bío existen más de 30.000 familias sin esa "vivienda digna", y el 83 por ciento de ellas, ni siquiera cuentan con servicios de agua potable.

El hacinamiento, la promiscuidad, la violencia intrafamiliar son consecuencias directas de esta situación, las que aumentan la sensación de miseria y la indignidad, aseguró Parra.

Esta carencia de viviendas se ha acrecentado durante la pandemia ya que miles de personas perdieron sus fuentes de ingresos, dejando de pagar arriendos y hacinándose en casas de familiares como allegados.

En la región han aumentado los campamentos, elevándose a 132 asentamientos irregulares. A pesar de esta aguda crisis, los programas de subsidios siguen en cámara lenta, llenos de trámites engorrosos e inalcanzables para las familias.

La insuficiencia de los montos asignados impiden a los beneficiarios la compra de viviendas usadas y la ausencia de proyectos de construcción de viviendas sociales, agudizan el problema que se ve agravado por la pérdida de habitabilidad de muchas viviendas, cuyas poblaciones carecen de obras para la evacuación y tratamiento de las aguas servidas, la ausencia de alcantarillado, de agua potable y caminos de acceso.

Es urgente desarrollar un Plan Maestro de Construcción de Viviendas Dignas para Bío Bío, programa en el que se involucren todas las autoridades, tanto en la identificación de terrenos aptos, su urbanización, saneamiento y adaptabilidad, así como en la concesión de subsidios suficientes y construcción acelerada, terminando con la actual indolencia y elusión de responsabilidades.

Bío Bío no puede seguir siendo postergada en este Derecho Humano Esencial.