Fue el pasado jueves, cuando una emergencia terminó con fatales consecuencias. Un pequeño falleció.
Recordemos que, los hechos se desencadenaron luego que un llamado desde la escuela Aguada de Cuel, solicitara con urgencia de una ambulancia en el lugar, a raíz de un menor de edad -paciente cardiaco- que habría sufrido una crisis.
Cuando la ambulancia se desplazaba a atender el llamado de emergencia, el vehículo fue colisionado por alcance por una camioneta y posteriormente volcó, dejando a sus ocupantes heridos.
Pese a que se enviaron otras tres unidades de emergencia al lugar, a raíz de la premura del tiempo, y la necesidad urgente que tenía el menor de recibir asistencia médica, su familia decidió transportarlo en un vehículo particular al Servicio de Urgencia del Hospital de Los Ángeles, donde ingresó en un estado bastante crítico.
Francisco Osses no aguantó. El pequeño falleció a consecuencia de la enfermedad que padecía.
ACLARACIÓN
Diversas fueron las especulaciones sobre reiterados llamados para solicitar una ambulancia, y la espera de esta por parte del vehículo particular que transportaba al pequeño, la que se dice que nunca habría llegado.
Ante esto, desde el Servicio de Salud Biobío, se realizó una declaración pública para aclarar esta situación, y las circunstancias en qué ocurrieron los hechos.
Al respecto, el Servicio, sostuvo que “ante el lamentable fallecimiento de Francisco Osses (Q.E.P.D), en primer lugar como SAMU y Servicio de Salud Biobío quisiéramos unirnos al dolor que aflige a su familia en estos momentos, y explicar las circunstancias que ocurrieron tras el accidente que tuvo la ambulancia que realizó el procedimiento”.
En este sentido, es importante informar que a las 15:38 se recibió un llamado por parte de una profesora del colegio “Aguada de Cuel”, informando sobre un menor con problemas cardiacos que se había desvanecido en el bus de traslado. Ante esto el regulador despachó a las 15:39 un Móvil SAMU avanzado, el cual llegó al cruce para ingresar a la escuela a las 15:55.
A lo que agregó que “lamentablemente en ese momento fue colisionado por atrás por un vehículo particular, lo que hizo que la ambulancia se volcara a 800 metros del colegio, resultando sus funcionarios con lesiones de carácter grave”.
En esos momentos se acerca a ayudar una médico del Hospital de Nacimiento, Dra. Susan Hidalgo, que transitaba por el lugar y vio el accidente de la ambulancia; ante la situación los funcionarios del SAMU le solicitan que se acerque al colegio, ya que la emergencia del menor revestía un carácter de mayor gravedad.
Del mismo modo, se detalla que la facultativa evalúa al menor e inicia maniobras de reanimación, y decide subirse al vehículo del padre del niño para acompañarlo en el traslado a Los Ángeles, decisión que se tomó ante el volcamiento del móvil SAMU.
En paralelo, a las 15:56 el centro regulador despachó 3 ambulancias, una con un médico para ir a atender al menor, más una avanzada y otra básica para acudir en apoyo de los funcionarios del SAMU.
“Lamentablemente, y debido a la complejidad de la doble emergencia, a lo que se suma al tráfico en la ruta y lo acotado de los tiempos de respuestas, la ambulancia no pudo identificar e interceptar al vehículo que trasladaba al menor, llegando éste al hospital de Los Ángeles trasladado por su padre, acompañados por Carabineros y la Dra. Susan Hidalgo del hospital de Nacimiento”.
A pesar de todas las maniobras realizadas, tanto por sus profesores, como por la Dra. Hidalgo, y los equipos de reanimación del Complejo Asistencial, Francisco, no logró salir del paro cardiorrespiratorio, manifestaron desde el Servicio de Salud Biobío.
LLAMADO A RESPETAR
Ante esta situación, el Servicio de Salud Biobío, enfatizó la importancia de facilitar el desplazamiento de estos vehículos de emergencia.
“Quisiéramos hacer un llamado a los conductores de la provincia a respetar y facilitar el desplazamiento de las ambulancias, más si llevan sus balizas y sirenas encendidas porque esto significa que acuden a emergencias vitales”.
En el caso de ayer, el choque por la parte de atrás a un vehículo de emergencia, no solamente significó que éste resultara con daños de alta consideración y sus ocupantes con lesiones, sino que también impidió que el móvil no lograra llegar al lugar donde se produjo la emergencia.