Hace un poco más de dos años, y a cargo de la sargento segundo Angelina Cuevas, se creó la Oficina de Violencia Intrafamiliar, dependiente de la primera comisaría de Carabineros de Los Ángeles.
¿Su objetivo? Acoger a personas y casos de violencia doméstica que se registren tanto en sectores rurales como urbanos de la comuna.
Desde que se creó esta oficina, las cifras en cuanto a cantidad de detenidos y denuncias han cambiado completamente; ello, en virtud de que “la gente ha tomado conciencia debido a las campañas preventivas y charlas que se han realizado durante el año pasado y este periodo”, explicó Cuevas.
Durante el primer trimestre de 2015, esta oficina recibió un total de 80 denuncias por Violencia Intrafamiliar; en igual periodo de 2016, la cantidad de casos acogidos fueron 79.
En materia de detenidos, el escenario cambió de forma radical. Si el primer trimestre de 2015 fueron detenidas 9 personas por este tipo de hechos, en igual periodo de 2016 esta cifra se disparó a 33.
Lo que no deja de llamar la atención es el aumento de hombres que han denunciado ser víctimas de violencia intrafamiliar; actualmente, son cada vez más los que se atreven a dar cuenta de la situación que los afecta ante Carabineros de Chile.
Si durante el primer año de funcionamiento de esta oficina, la sargento segundo Cuevas recibió a penas una denuncia de violencia intrafamiliar por parte de un hombre, el año pasado la cifra se disparó a 15.
Del total de denuncias recibidas, “la gran mayoría es por violencia psicológica. La gente ya toma conciencia de que debe denunciar debido a que –en su calidad de mujer u hombre- todos merecemos el respeto dentro de una relación”, relató Cuevas.
En la actualidad, y para prevenir este tipo de situaciones, tanto la encargada de la Oficina de Violencia Intrafamiliar como funcionarios de la Oficina de Atención Comunitaria de Carabineros de Los Ángeles, están apuntando a los potenciales agresores.
Acuden a colegios, empresas constructoras o lugares donde existan hombres a fin de que puedan denunciar. “Antes no lo hacían; cuando comencé (con esta oficina), tuve una primera denuncia que fue de un varón. A estas alturas, la cifra ya va en 15”, relató Cuevas.
De ahí la importancia de llegar a la mayor cantidad de hombres posibles; para ello, los esfuerzos están enfocados al desarrollo de campañas que permitan que los varones conozcan sus derechos y que también son y pueden llegar a ser maltratados psicológicamente por sus mujeres.
Asimismo, los esfuerzos están también orientados a prevenir el maltrato hacia adultos mayores; la iniciativa está preocupada del abandono sufrido por este segmento de la población.
Todo ello, a fin de evitar que sufran agresiones por parte de sus hijos, de quienes los cuidan o de algún otro miembro de la comunidad en la que se desenvuelven.
Las denuncias por maltrato hacia una persona pueden ser realizadas de forma anónima al Fono Familia, nivel 149, o en la misma oficina que dirige la sargento segundo Angelina Cuevas.