"Nosotros como Cuerpo de Bomberos hemos pecado al no denunciar las falsas alarmas"

Cerca de mil 100 llamados ha recibido la central de bomberos de Los Ángeles en lo que va del año, de las cuales sólo 8 han sido falsas alarmas. Si bien este número no alcanza a ser un uno por ciento del total, el daño que se hace a la institución y a la comunidad es considerable.

Así lo hizo ver el comandante de la institución a nivel local, Raúl Márquez, quien explicó que por ejemplo, en caso de incendio, se despachan dos carros bomba y uno porta escala, material mayor que queda fuera de circulación en caso de ocurrir una emergencia real.

En materia económica, sostuvo que cada carro necesita un litro de combustible para avanzar dos kilómetros, y a esto se suma el riesgo de tránsito al que se ven expuestos los voluntarios y maquinistas, quienes pueden protagonizar un accidente. "Todo esto va más allá de hacer una broma, ya que tiene consecuencias serias", enfatizó Márquez.

Materia legal

En Chile hay normas legales que sancionan las falsas alarmas, ya que el año 2002 se introdujo una modificación al código penal con el articulo 268 bis, que castiga a quienes dan falsa alarma de incendio, emergencia o calamidad pública a los cuerpos de bomberos o servicios afines, con penas que van desde 61 a 541 días

"Creo que nosotros como cuerpo de bomberos hemos pecado por no denunciar las falsas alarmas, ya que los elementos para hacerlo están. La operadora pide datos al recibir la llamada, y aunque el nombre sea falso, queda el registro del número de teléfono y esos antecedentes se pueden poner a disposición de la Fiscalía", reflexionó el comandante.

Junto con ello recalcó que una falsa alarma hoy día es un delito, y añadió que "si el día de mañana nosotros empezamos a decidir efectuar las denuncias, las personas se van a encontrar con la sorpresa de que pueden ser sancionadas e ir a la cárcel".