La Tribuna y Santo Tomás Los Ángeles lanzaron este martes la segunda versión del Premio Vocación Técnica, iniciativa que mantiene abierta su convocatoria hasta el 21 de noviembre para reconocer el trabajo de estudiantes, docentes y establecimientos dedicados a la educación técnico-profesional en la provincia de Biobío. Esta segunda edición consolida un esfuerzo que nació en 2024 para poner en valor una modalidad históricamente relegada del reconocimiento público.
La provincia cuenta con cerca de 30 establecimientos que imparten esta modalidad formativa y han preparado a miles de jóvenes en especialidades que van desde la innovación tecnológica hasta el compromiso ambiental y social. Sin embargo, la atención se ha concentrado tradicionalmente en las pruebas de acceso universitario, como si el desarrollo territorial dependiera exclusivamente de esa ruta. Esta distorsión ha reforzado la percepción de que la formación técnica es una opción secundaria, cuando la evidencia muestra lo contrario.
La primera edición del premio en 2024 reveló la magnitud del trabajo que se realiza en los liceos de la provincia. El proyecto "Fuego Silencioso" del Liceo Bicentenario El Huertón —robot para combatir incendios forestales subterráneos— triunfó en Innovación y Tecnología. El Liceo Crisol de Mulchén obtuvo el reconocimiento en Medio Ambiente con iniciativas de hidrógeno verde. El Liceo Polivalente de Nacimiento fue distinguido en Liderazgo Social por realizar mantenciones eléctricas en sedes vecinales y hogares de escasos recursos. Todos estos aportes trascienden el plano formativo y entregan soluciones concretas a problemas reales de sus respectivas comunidades.
Lo relevante de esta iniciativa no es el galardón en sí mismo, sino la idea que sustenta: que la formación técnica merece el mismo reconocimiento, cobertura y valoración que otros niveles. Cuando se destinan recursos y plataformas para visibilizar este trabajo, se releva que el desarrollo territorial no depende solo de profesionales con grado académico, sino de técnicos capacitados que innovan, resuelven problemas y transforman.
La provincia de Biobío está compitiendo a nivel mundial en innovación. Liceos rurales y urbanos han desarrollado proyectos que abordan desde la crisis climática hasta la inclusión social, lo que ha permitido que estudiantes descubran su vocación, que docentes tengan la oportunidad de inspirar más allá del aula y que los establecimientos comprendan su rol formador integral. Este trabajo merece ser conocido, celebrado y utilizado como referente.
El Premio Vocación Técnica no resuelve los problemas estructurales de la modalidad en Chile, pero contribuye a transformar la percepción social sobre ella. Y esa transformación es condición necesaria para exigir políticas públicas que la fortalezcan.
La invitación es a que los establecimientos, docentes y estudiantes muestren sus proyectos y sean parte de esta iniciativa, que busca demostrar que el futuro del desarrollo regional se construye también desde la educación técnico-profesional.