Día Mundial del Síndrome de Down

El 21 de marzo de cada año se conmemora el Día Internacional del Síndrome de Down, una instancia que busca recordar a todas las personas que tienen esta condición y que fue establecida por la Asamblea General de Naciones Unidas.

En Chile, nacen en promedio 2,7 niños cada mil con este síndrome, cifra que duplica a la tasa mundial, que es de 1,4 niños cada mil.  Esta prevalencia que duplica los nacimientos que observamos en muchos otros países del mundo, nos obliga a priorizar políticas públicas que apunten a la inclusión, tanto en el ámbito escolar, como laboral. Y en definitiva, apunten a una total inclusión social.

Actualmente existen dos piezas de legislación que son fundamentales. La ley 20.422, que establece igualdad de oportunidades para todas las personas en el territorio chileno, y la ley 21.015, que dictaminó la obligación de incorporar un 1% de personas con discapacidad al interior de las empresas que tengan cien personas o más. Sin duda leyes que han ayudado mucho para poder avanzar y visibilizar.

En este sentido, existen algunos esfuerzos que se han gestado desde distintos gobiernos para lograr que las personas con discapacidad intelectual y Síndrome de Down, sean partícipes de la sociedad.

No obstante, queda mucho trabajo por hacer, iniciativas que parten desde la base de los establecimientos educacionales, y una real dinámica de integración con programas educativos que inserten efectivamente a nivel social, y de conocimientos.

Otro paso, es dar la oportunidad a nivel laboral y que las empresas -no sólo por lo que obliga la ley- sino de mutuo propio integren mayor cantidad de trabajadores y trabajadoras con condiciones distintas, quienes han demostrado pueden desempeñarse con excelencia y gran responsabilidad.

La valoración y el respeto por las personas diversas o con capacidades diferentes deben ser parte del sello de cada empresa o institución, así como también un compromiso de la Sociedad de mejorar la calidad de vida de las personas, demostrando que ellos pueden hacer la diferencia en el éxito de un país realmente inclusivo.