Ad portas del segundo año de gobierno

Este primer año del segundo periodo del Presidente Piñera en el gobierno ha sido controvertido. Si revisamos la prensa local en la provincia, era un hervidero de críticas por el equívoco nombramiento de gobernador, además del emplazamiento de parlamentarios por los cargos que debían ser “devueltos” al gobierno que habría ganado ampliamente en las urnas.

También se solicitaba la presencia del intendente en la provincia y reactivar los megaproyectos que marcarían el desarrollo de Biobío.

De aquello solo queda el recuerdo, sin embargo, hay temas que aún no se solucionan, por ejemplo el cargo vacante del Servicio de Salud Bíobío, que cumple varios meses en subrogancia. 

Asimismo, los proyectos que aún se mantienen en el limbo como el aeropuerto; mientras el oficialismo dice que no, hay otros legisladores que le dan alas nuevamente.

Igualmente, la situación de San Rosendo y Laja respecto a los prolongados cortes de luz; ambos alcaldes participaron en una mesa con las empresas forestales y transmisoras de energía e incluso se dio a conocer que efectivamente se realizaría una tercera línea. Ese asunto quedó en el olvido; nadie se ha pronunciado de aquello.

Se ha avanzado, hay que admitirlo, pero también se espera una autocrítica leal y honesta del gobierno central frente a todo lo que ha ido quedando en el camino.