Sociabilizar la prevención: la tarea pendiente

El día de ayer, causó impacto a nivel nacional el desborde del estero Quilque en distintos puntos de la ciudad de Los Ángeles. El hecho provocó anegamiento de viviendas y locales comerciales, además de dejar sin conectividad por varias horas el sector de la Vega Techada.

Pese a que a nivel municipal y gubernamental, se trabajó rápidamente en recuperar la conectividad y canalizar las aguas a las bajadas de aguas lluvia, queda una tarea pendiente que aún se debe mejorar para eventos posteriores: sociabilizar antes de que ocurran las emergencias.

Durante el fin de semana, ya se sabía que caerían fuertes lluvias en la provincia de Biobío, incluso se habla que durante esta jornada podrían caer 40 milímetros de agua, pero más allá del pronóstico, no conocimos ninguna campaña de prevención de la Onemi para que la gente tome conocimiento, los empresarios, canalistas y todo aquel que tenga pertinencia frente a estas situaciones.

Tampoco se realizaron Comités Operativos de Emergencia, para anticiparse para los meses de invierno.

Hasta ahora, las autoridades regionales que han llegado a Los Ángeles, salvo excepciones, la mayoría han llegado a hacer relaciones públicas más que acciones concretas.

Lo que aconteció ayer deja varias lecciones que permiten elaborar un plan de trabajo más concreto. En materia de emergencia, el gobierno y la municipalidad deben estar conectados, no sólo para recabar los datos, sino para todo el proceso anterior, presente y posterior que enfrentan las situaciones de esta magnitud. Esto no implica ideologías, es una política transversal por el bienestar de la población.

Los medios de comunicación como La Tribuna, siempre han estado llanos a dar a conocer todo lo que tenga relación a generar conciencia en la comunidad cuando hay hechos que atender, por lo tanto, lo único que falta es ordenar un poco las instituciones, definir los roles, especialmente de la gente nueva y de una vez, eliminar las relaciones públicas y ponerse a trabajar de manera intensa para que situaciones como las ocurridas la jornada del lunes no se repitan o al menos se prevean.