Menos politiquería y más desarrollo

Este periodo presidencial y parlamentario, ha sido uno de los peores de la democracia. No por las políticas que ha implementado la mandataria, ya que en materia de ideologías, cada sector tiene su forma de pensar y la democracia permite las elecciones por parte de la ciudadanía.

Si no que el escenario hostil marcado por la falta de transparencia y probidad, destruyeron la poca confianza que tenían las personas en relación a las administraciones y usos del poder.

Todos los sectores políticos involucrados en hechos cuestionables, e incluso algunos ilícitos, han desmoronado la imagen de chile a nivel nacional e internacional.

Sin embargo, lejos de buscar una solución, caminos que permitan salir de esta compleja situación, los actores que encabezan el poder, se han dedicado a buscar el empate en estos hechos negativos.

Atacar sin construir, destruir por poder y enlodar la imagen del contrincante por obtener beneficios electorales futuros, es el mecanismo que ha utilizado gran parte de la clase política del país de forma transversal, como su modus operandi de acción.

Se ve desde los concejales de una comuna pequeña, los candidatos a alcalde de las grandes ciudades, parlamentarios y quienes buscan el máximo sillón del país en La Moneda.

Esta politiquería no permitirá desarrollo alguno. Mientras estén buscando quien es más culpable, la economía, el empleo, el emprendimiento están bastante estancados, por la poca capacidad de sentarse sin odios a analizar qué es lo mejor para este territorio.

Hay dos frases que destacar de los últimos presidentes. Sebastián Piñera en su oportunidad, señaló cuando lo acusaban de intervenir las elecciones de la ANFP: “miente, miente que algo queda”, debido a que el poder del rumor, gracias a las redes sociales, ha dado por cierto una cantidad de mentiras que han destruido a muchas personas y hoy está ocurriendo lo mismo. Hay políticos que se creen jueces y han envenenado a la sociedad con sus teorías, cuando es el poder judicial quien debe resolver este tema.

Otra frase destacada, es la que hizo Michelle Bachelet, cuando existían rumores de que renunciaría. Aquí, la Presidenta fue clara en reconocer la situación compleja del país y hablar de “realismo sin renuncia”, indicando que enfrentará la situación para sacar adelante el país.

La ciudadanía tiene la tarea de comenzar a elegir a sus líderes no por el carisma, por la belleza o por la selfie que se tomó con los vecinos, si no por su capacidad profesional, su probidad y trabajo real por la gente. De lo contrario, sólo se sumará a las críticas, siendo que tiene el poder de cambiar el escenario.