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En el primer juicio oral que se realizó en la Región del Bío Bío por videoconferencia debido la pandemia del Covid-19, resultó condenado Rubén Sandoval León, después que la Fiscalía de Los Ángeles lo acusara por porte ilegal de arma de fuego, al ser sorprendido el 9 de septiembre de 2017 con una pistola Colt calibre 38 en la vía pública en Mulchén.
La Defensoría Penal Pública había tratado de impedir la realización del juicio por videoconferencia, pero el Tribunal Oral en lo Penal de Los Ángeles acogió la petición del fiscal Juan Fernando Acevedo, quien argumentó que estaban dadas todas las garantías para que éste se llevara a cabo.
El punto fue refrendado por la Corte de Apelaciones de Concepción, al rechazar una solicitud de no innovar y un recurso de amparo que había interpuesto la defensa.
El fiscal Juan Fernando Acevedo explicó que en principio, el juicio estaba previsto de manera presencial para marzo pero la emergencia sanitaria, obligó a pedir su realización a través de la plataforma de zoom.
Al cabo, pese a los reparos de la defensa que presentó acciones en los tribunales, eso fue desechado y se pudo llevar a cargo el juicio oral en contra de Rubén Sandoval León.
De esta manera, los policías que realizaron las diligencias investigativas y el perito del Laboratorio de Carabineros (Labocar) que analizó el arma de fuego, declararon a través de la plataforma digital Zoom, ya sea desde sus domicilios o desde la comisaría.
El fiscal Juan Fernando Acevedo está solicitando al tribunal que sancione a Rubén Sandoval con una pena de cuatro años de presidio. La sentencia será dada a conocer por los jueces el domingo próximo, también mediante una audiencia a distancia.
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