Una de las jornadas más esperadas por las familias chilenas ya tiene fecha. El próximo sábado 24 y domingo 25 de mayo se celebrará una nueva edición del Día de los Patrimonios 2025, evento que desde hace años ha logrado cautivar a grandes y chicos, con una oferta cultural gratuita que se despliega a lo largo del país.
La actividad, organizada por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, busca abrir las puertas de diversos espacios históricos, religiosos y sociales, tales como barrios tradicionales, cementerios, iglesias y edificios emblemáticos, para que la ciudadanía pueda reconectarse con sus raíces y conocer más sobre la riqueza cultural que forma parte del territorio nacional.
Según la cartera organizadora, esta es una instancia que "nos invita a reencontrarnos con nuestras historias, a sentir nuestras raíces y a celebrar la diversidad que nos une como país".
Por ello, todas las actividades son de acceso gratuito, aunque algunas requieren inscripción previa por contar con cupos limitados.
La edición 2024 del Día de los Patrimonios registró cifras históricas, con más de 1,6 millones de visitas presenciales y un total que superó los tres millones si se considera la participación virtual. Además, se alcanzó un 90,5% de tasa de reporte de actividades, el porcentaje más alto desde que existen registros de esta celebración.
Con este precedente, el objetivo de este año es superar la convocatoria anterior, consolidando al evento como una verdadera fiesta ciudadana de la cultura y la memoria colectiva.
Las organizaciones sociales, instituciones educativas, fundaciones y agrupaciones culturales que deseen participar con actividades en este fin de semana patrimonial aún tienen tiempo para sumarse.
El plazo para registrar actividades finaliza el lunes 20 de mayo, y los interesados pueden hacerlo ingresando directamente al sitio web oficial del Día de los Patrimonios.
Con eventos programados desde Arica hasta Magallanes, la invitación está hecha: este 24 y 25 de mayo, el país se volverá a reunir en torno a su patrimonio, su historia y sus múltiples expresiones culturales. Una celebración que promete nuevamente llenar calles, museos y rincones con vida, reflexión y comunidad.