Cabrero bajo el agua: el duro fin de semana de los habitantes de la comuna forestoindustrial

Más de 400 viviendas son las afectadas por las inundaciones en la comuna de Cabrero. Esteros y canales colapsaron, luego de lluvias sin pausa que comenzaron el pasado miércoles y que se extendieron hasta el día sábado.

Según el informe emitido por el municipio ayer domingo, se estima que el temporal dejó a más de mil 500 damnificados, siendo Monte Águila el sector más afectado.

Ayer, gracias al tenue sol, las cuadrillas municipales y maquinaria pesada realizaron labores de desagüe en las zonas afectadas, manteniéndose habilitados los albergues en la escuela Osvaldo Vera Villarroel de Monte Águila y el gimnasio Osvaldo Muñoz de Cabrero, donde se está recibiendo la ayuda solidaria de la comunidad, como sacos de carbón, agua envasada, cloro, frazadas, alimentos no perecibles y artículos de aseo.

El alcalde Mario Gierke expresó su gratitud a todos quienes se movilizaron ante esta emergencia, destacando al equipo municipal, Bomberos, Carabineros, Ejército y muchos voluntarios, instituciones y empresas que aportaron diferentes elementos para afrontar la emergencia.

ALERTA ROJA

La comuna fue declarada en alerta roja recién la tarde del viernes, tras una reunión sostenida por el alcalde Gierke en el albergue de Monte Águila, adonde llegaron el gobernador provincial, Ignacio Fica; el comandante del Regimiento Los Ángeles, coronel Iván Aguilera; la diputada Joanna Pérez y representantes de Bomberos y Carabineros, además de la directora regional de la Onemi, Carolina Zambrano.

De 18,30 a 22,30 horas estuvo en Monte Águila el intendente regional Sergio Giacaman, quien recorrió, junto al alcalde y la directora de Onemi, las villas Esperanza y Nuevo Amanecer, las más afectadas por las inundaciones. El sábado en la tarde llegó al lugar el ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, acompañado por el director regional de Vialidad, Daniel Escobar, entre otros personeros públicos. Allí recibió del alcalde un detalle de la situación que estaba afectando a la comuna.

LA PRIMERA ALERTA

La alarma se dio en la tarde del jueves, cuando reventaron los canales de regadío que sirven de drenaje de aguas lluvias en esta época. El sector sur de Monte Águila fue el más afectado. También ocurrió eso en diversos puntos del área rural de la comuna, como El Progreso, Membrillar, La Mancha, El Repelón, Tapihue, entre otros, donde familias sufrieron la inundación debido a los desbordes de los cauces.

El ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, coordinó en terreno las labores.

Maquinaria pesada del municipio y de empresas privadas que prestaron su apoyo se dirigieron a los puntos más críticos, laborando hasta altas horas de la madrugada del sábado, mientras las precipitaciones no amainaban.

El alcalde Gierke destacó que la declaración de alerta roja permite al municipio la seguridad de que los procedimientos de emergencia adoptados son adecuados a la urgencia. Asimismo, manifestó su esperanza en que la Onemi acoja lo solicitado en sucesivos informes Alfa de Emergencia.

Subrayó que el equipo municipal ha trabajado ininterrumpidamente las 24 horas de cada día y este domingo seguían sus funcionarios registrando fichas sociales de familias damnificadas, entregando ayuda urgente y movilizando cuadrillas, motoniveladoras y retroexcavadoras a lugares más afectados.

El sector de Villa Esperanza fue uno de los más afectados por las inundaciones.

LA EMERGENCIA SIGUE

La emergencia no ha pasado, apuntó el alcalde, pues si bien brilló el sol este domingo, aún están por todas partes los rastros del paso de las aguas sin control, desbordadas por todo el territorio. Finalmente, recordó que se efectuó una intensiva Operación Invierno de limpieza de canales en otoño, lo que impidió que otros sectores fueran más afectados. Un fenómeno climático tan crítico como este no se registraba desde el 2006 en esta comuna, pero el trabajo sin tregua del equipo municipal y de tantos organismos y personas, así como la solidaridad de muchos cabrerinos y monteaguilinos, nos permitió enfrentar unidos este desafío tremendo, concluyó.