Discapacitados se renuevan tras proyecto de microempresa inclusiva

Un accidente que lo dejó en situación de discapacidad -adolece de lesiones en sus muñecas y caderas, según contó-, lo obligó a ingeniárselas para poder seguir llevando el sustento a su hogar.

Así fue como hace tres años, Víctor Rivas, “don Chamelo” como lo conocen en Antuco, compró un carrito a pedal para realizar fletes por la ciudad.

Un trabajo que, pese a su condición, le ayudó inicialmente a mantenerse activo físicamente, pero que con el tiempo y debido al esfuerzo que implicaba pedalear su carro en largos tramos y con carga, empezó a complicarlo.

Afortunadamente, justo cuando comenzó a resentirse de sus dolencias, Víctor resultó ser una de las personas beneficiadas con un cupo para un proyecto de microempresa inclusiva que se ejecutó en la comuna.

Esto le permitió asistir a cursos donde lo prepararon para desarrollar de mejor forma su negocio. Esto, finalmente, se tradujo en la compra de un carro más moderno a motor, que le ha permitido a Víctor ejercer, por una parte, de forma más rápida y efectiva su labor y, por otra, descansar de sus dolencias mientras manipula su nuevo móvil.

“Ahora descanso más de las piernas, claro que cuando tengo que hacer algún traslado de madera lo hago en el otro, en el triciclo a pedal, porque este otro no es para la madera, es más para sacos, bolsas y cajas”, comentó.

De todas formas, reconoce que su nueva inversión, la que, según contó, tuvo un costo de alrededor de 1 millón de pesos, le cambió la vida. “Ando más rápido y lo otro es que no hago fuerza con las piernas, esa es la garantía que hay”, destacó.

Este esforzado hombre lució su nueva maquinita durante el desfile de Fiestas Patrias realizado en la comuna de Antuco.

El vehículo lo compró con la asesoría de profesionales de la Consultora San Mateo que fue la entidad que se adjudicó la realización de estos cursos de micro-emprendimiento dirigidos a personas con capacidades diferentes y que participan del Consejo Comunal para la Discapacidad que funciona al alero de la Municipalidad de Antuco.

En total, fueron 10 los cupos asignados, uno de ellos fue para Víctor Rivas y otro para Claudia Jara, quien ejerce como tesorera de la instancia.

“Nos ayudaron a cómo enfocar bien nuestro proyecto, hubo capacitaciones de contabilidad, cómo emprender mejor (…) en mi caso yo emprendí en un negocio con productos derivados del trigo como mote, harina tostada”, contó ella.

“Me implementaron compra de maquinaria de enseres que necesitaba para poder llevar a cabo mi negocio y con eso pude postular a un equipamiento que me estaba haciendo falta”, agregó.

Dijo, finalmente, que el 26 de septiembre es la jornada culmine del proyecto, tras casi dos años de estar asistiendo a diferentes ciclos de capacitaciones.