La apuesta por el consumo de chocolate de buena calidad

Claudia Robles Maragaño

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Chile encabeza el ranking de los países que más consumen chocolate dentro de Latinoamérica con un promedio de 2,1Kg per cápita, según las cifras de la Agencia Internacional Euromonitor. 

Aunque este ranking de consumo per cápita de chocolate sitúa a Chile entre los de mayor demanda, la realidad local se aleja de esas cifras, según la apreciación de Mariela Mohr, quien lleva años dedicada al rubro, en la chocolatería “Almendra” en el centro de Los Ángeles.  

“Yo diría que los padres desgraciadamente evitan el chocolate a sus hijos pese a que es súper bueno y sano comer cacao. Faltó educación. Nos prohibieron en vez de habernos educado con respecto del consumo de cacao”, expresó en relación a la ley de etiquetado de alimentos.

Agregó que el consumo de chocolate de buena calidad y en forma medida aporta a la salud con beneficios comprobados, “el problema es que a veces les estamos dando grasa a los niños”.

Los beneficios del cacao son conocidos a lo largo de la historia. El propio Hernán Cortés aseguraba que una taza “de esa bebida indígena”, sostenía las fuerzas de un soldado durante todo un día de marcha.

La industria chocolatera está en alza a nivel mundial y Chile tuvo en 2016, un consumo per cápita de 1,8 kilos, superando a países de la región productores de cacao tales como Brasil, México y Colombia.

Según destaca El Mercurio, citando información de Euromonitor, los chilenos también superan en consumo a naciones que cuentan con una larga tradición chocolatera, como Argentina y Uruguay, y se ubica como líder en América Latina.

Pese a este incremento, Chile aún está lejos de Suiza, donde el consumo per cápita asciende a casi nueve kilos por persona al año.

VARIEDAD

Diferentes tipos de chocolate, muchos de origen alemán, polaco, italiano y suizo son traídos a Los Ángeles, y para todos los gustos y exigentes paladares. Otros, incorporando las exigencias especiales para cuidar de la salud de los diabéticos.  

Mariela Mohr reconoce que los gustos han ido cambiando y que el mercado responde a esa demanda, con chocolates de mayor dulzor o definitivamente amargos. 

Están los chocolates dulces, con un 30% a un 50% de cacao. Luego los semiamargos, del 60 al 75% y los amargos, del 85% al 100%. “Son los chocolates amargos los que tienen todas las propiedades que aportan bienestar y es ese, el chocolate que deberíamos consumir. Ojalá todos los días un pedacito de ese chocolate y la verdad es que nos da la energía. Tiene muchas propiedades”.

“Hay un chocolate muy rico que viene de Madagascar con un sabor un poco más intenso. Acá, tenemos chocolate colombiano, ecuatoriano, de Costa Rica, que afortunadamente llega a Chile. También hay diferentes tipos de rellenos, depende de cada uno, pero lo básico del chocolate, es la cantidad de cacao que lo va diferenciando y afortunadamente hay chocolate sin azúcar para las personas diabéticas. Endulzados con stevia o  maltitol, depende de cada persona”.

LAS TRADICIONES

Mariela Mohr, que conserva la tradición de su familia, originaria de Osorno, comenta que al paso de los años se han ido perdiendo las tradiciones, “lo más triste es cuando un pueblo pierde la tradición, es como ir perdiendo la identidad, y desgraciadamente, en la pascua del conejo o Navidad, ha bajado mucho el consumo de chocolate que es como una tradición”. 

Plantea que el consumo de chocolate alto en cacao es beneficioso para la salud. “Es súper bueno y sano comer chocolate, alto en cacao, en forma medida y de buena calidad. A todo el mundo le encanta recibir de regalo un chocolate”. 

Si bien los gustos son variados, la industria productora chilena se ha abocado a la elaboración a base de leche y almendras, aunque los chocolates extra cacao o rellenos tienen también sus seguidores.