Positivos resultados arrojó nueva fiscalización en agrícola Ancali

El pasado jueves 10 de enero el seremi de Salud del Biobío, Héctor Muñoz, junto al fiscalizador de Los Ángeles, Milton Toledo y a otros profesionales de la Unidad de Gestión Ambiental, visitaron las instalaciones de Agrícola Ancali en el marco de una serie de inspecciones que la nueva autoridad de Biobío está llevando a cabo para conocer las principales empresas agrícolas de la región.

Según consta en el acta de inspección emitida por el seremi de Salud, los profesionales recorrieron las instalaciones conociendo el trabajo productivo que se realiza en la que actualmente es la lechería robotizada más grande del mundo. En el documento se destaca, que hay ausencia de moscas en las áreas visitadas y que los olores son inherentes al proceso productivo.

En su visita, el seremi de Salud manifestó que “estuvimos monitoreando todos los procesos de esta lechería, evaluamos todos los procedimientos de los olores, todo lo que pasa con el control de vectores, y en eso hemos visto que con los años ha ido mejorando”.

Del mismo modo, la autoridad sanitaria agregó que la seremi de Salud abarca distintas áreas, y todas se están fiscalizando, no sólo a nivel central sino también en las delegaciones provinciales como la de Biobío en Los Ángeles, porque el resguardo de la salud de la población en todo lo que compete a la institución.

La seremi de Salud, además del control de vectores, fiscaliza en esta empresa el almacenamiento de sustancias peligrosas, almacenamiento de residuos peligrosos y no peligrosos, la declaración de emisiones y los protocolos de protección a la salud laboral de los trabajadores. 

TRABAJO COLABORATIVO DE LA EMPRESA

Respecto a esta última visita desde la Seremi y las mejoras que ha presentado la agrícola con respecto a su trabajo de mitigar los malos olores y la proliferación de moscas, el gerente general de Agrícola Ancali, Miguel Aparicio, explicó que durante la primavera y el verano semanalmente se realizan conteos de vectores, permitiendo que, en coordinación con los vecinos, se realicen manejos preventivos, como fumigaciones. Además, en cuanto a olores, "desde hace más de un año está operando un sistema de cortinas de aromatizantes que están instaladas en puntos específicos dentro de las instalaciones para poder reducir la percepción de olor en las zonas aledañas al plantel”, sostuvo.

Paralelamente, el ejecutivo destacó el trabajo que se viene desarrollando por parte de la Agrícola Ancali junto a los vecinos de la zona y la delegación municipal de San Carlos de Purén.

Entre junio y noviembre de 2018, precisó, se realizaron 4 cursos con cerca de 280 horas de clases impartidas que comenzaron con el taller de sobre "Técnicas de cuidado del medio ambiente".

Posteriormente, se realizó el de “Técnicas de Riego y producción de hortalizas”, para concluir con los de “Peluquería y cosmetología” y “Técnicas de gestión apícola”. "En total, participaron 44 personas de las distintas comunidades aledañas al Plantel Lechero de Agrícola Ancali, principalmente de San Carlos de Purén, Mirador y Miramar. Lo anterior ha sido una excelente instancia para conocernos, generar mayor conocimiento y oportunidades para nuestros vecinos", concluyó el ejecutivo.

TRABAJO PÚBLICO PRIVADO

Para contextualizar, a unos 10 kilómetros al sur de Los Ángeles, se encuentra ubicada la empresa Agrícola Ancali, una de las lecherías destacadas tanto a nivel nacional como internacional, con grandes estándares tecnológicos.

Es una lechería que posee más de cuatro mil cabezas de ganado, vacas lecheras de alta productividad, contando además con un biodigestor que produce energía eléctrica a través de los purines de los animales. Actualmente esta industria posee un sistema de producción completamente robotizado, además se está actualizando su resolución de calificación de impacto ambiental.

Empresa que no ha estado exenta de polémicas, y que hace 2 veranos -según los vecinos de la localidad de San Carlos Purén- genera una proliferación de moscas y olores molestos en su comunidad. 

El verano del año 2017, y según indicaron los vecinos de la localidad, la empresa fue denunciada en reiteradas oportunidades, porque se le sindicaba como generadora de gran cantidad de moscas, que afectaban esta localidad de cerca de 8 mil habitantes, al sur de la ciudad de Los Ángeles.

Debido a esta situación la autoridad sanitaria inició -en esa fecha- un sumario, comenzando una mesa de trabajo público privada, coordinada por la Gobernación Provincial de Biobío, instancia donde también participó la delegación provincial de la Seremi de Salud Biobío.