Yumbelino es el primer bebé nacido este 2019 en la región del Biobío

Mientras cientos de angelinos vibraban en la tradicional celebración de año nuevo en la Laguna Esmeralda disfrutando la fiesta pirotécnica de más de 10 minutos, el pequeño Diego Giovani Castillo Fernández llegó al mundo luego de estar 40 semanas en el vientre de Valeria, su joven madre.

Su nacimiento está marcado en su certificado a las 00.13 minutos del 1 de enero del 2019, además pesó casi cuatro kilos y midió prácticamente 50 centímetros.

La información la entregó el propio director subrogante del Servicio de Salud Biobío, doctor Fernando Vergara, quien tras visitar a la puérpera en la sala común del quinto piso de maternidad, comentó a Diario la Tribuna que el parto no tuvo ninguna complicación y que el bebé se encontraba en buenas condiciones.

“El parto fue natural, liderado por la matrona de turno Valeschka Valenzuela, y como era un embarazo de término todo el equipo de profesionales y técnicos estaban preparados para que este importante hecho sucediera en cualquier momento” explicó Vergara.

FUE MADRE POR SEGUNDA VEZ

El matrimonio Castillo Fernández oriundo de la comuna de Yumbel, esperaron el año nuevo en la sala de parto del Complejo asistencial, muy ansiosos por la llegada del nuevo integrante de la familia.

Así lo relató Valeria Fernández, quien en medio de la primera jornada de vida de Diego tuvo la gentileza de atender las visitas de los medios de comunicación.

“Estamos muy contentos, estábamos juntos con mi marido esperando que llegara nuestro segundo bebé. Mi hija mayor tiene 14 años así es que ha pasado un tiempo desde mi primera guagüita”  comentó risueña mujer de 36 años.

Asimismo, agradeció la atención prestada por el equipo de parto comentando que se habría sentido muy respaldada.

“Estoy muy agradecida de todos los que participaron en ese lindo momento, se portaron super bien” agregó sonriendo evidentemente cansada por el gran esfuerzo realizado un par de horas antes.

UN PENQUISTA EN BIOBIO

Aparte del nacimiento de Diego, se produjeron otros tres más, destacando uno que tuvo carácter de urgencia ya que la mujer, proveniente de Concepción, estaba de visita en la ciudad.

La penquista hizo ingreso al Complejo, pasada la media noche con síntomas de parto por lo que inmediatamente fue atendida por las funcionarias de maternidad y, se produjo el alumbramiento del bebé sin contratiempo aunque no era un embarazo de término, según datos entregados desde la unidad de maternidad.

Los demás partos fueron cesáreas, e igualmente se encontraban en perfectas condiciones de salud tanto los recién nacidos como sus madres.